Al este de la ciudad de Londres se encuentra una casa victoriana muy especial. No es casualidad que todos los que pasan por ahí se queden perplejos al ver cómo algunas personas se cuelgan del techo y ventanas, mientras otros escalan las paredes como si fueran Spider-Man. Sopitas
No es obra de la alta tecnología ni tampoco de un complejo truco de magia, es una instalación del artista argentino Leandro Erlich, en la que gracias a un gigantesco espejo se crea una ilusión óptica en tercera dimensión. Al reflejar la imagen de la fachada que se encuentra en el piso de manera horizontal, la imagen en el espejo da la impresión de que no hay gravedad.
Según el propio Erlich, el objetivo de la obra es “cuestionar la realidad” y hacer que “las personas piensen que las cosas no son siempre como parecen”.
Esta no es la primera vez que el artista realiza una instalación de este tipo, pues buena parte de obra se basa en hacer ilusiones en distintas locaciones que van desde elevadores, hasta piscinas.
Fuente: LP