Un homosexual moribundo ha obtenido el derecho a ser enterrado junto a su esposo después de que un juez decretara que el rechazo del estado de Ohio a reconocer el matrimonio gay era anticonstitucional.
Un mes después de la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos que rechazó una ley federal que definía al matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer, esta nueva decisión representa una esperanza para los defensores de los derechos de los homosexuales de obtener la igualdad total ante la ley.
John Arthur fue diagnosticado en 2011 de esclerosis lateral amiotrófica, también llamado enfermedad de Charcot, un mal neurodegenerativo y fatal, y actualmente se encuentra internado.
Sus amigos y familiares ayudaron a pagar a principios de mes un jet privado con equipamiento médico para que Arthur y su compañero de los últimos veinte años, James Obergefell, pudieran desplazarse a un estado que reconociera el matrimonio homosexual y casarse allí. Lo hicieron el 11 de julio en el aeropuerto de Maryland y el mismo día regresaron a Ohio (norte).
La pareja quiere que en su momento ambos sean enterrados juntos en el panteón de la familia de Arthur, pero el cementerio sólo permite que los descendientes o los cónyuges sean inhumados en el mismo panteón. Ambos pidieron, entonces, a la justicia que obligue al estado de Ohio a reconocer a Obergefell como el esposo de Arthur en su certificado de defunción.
«No se trata de un caso muy complicado», escribió el juez Timothy Black en un fallo divulgado el lunes. «A lo largo de la historia de Ohio la ley ha sido clara: una boda celebrada fuera de Ohio es válida en Ohio si es válida en el lugar donde se celebró».
Black estimó que la prohibición del matrimonio gay en el estado violaba la garantía constitucional de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.
Fuente: GV