El papa Francisco llega en mayo a la gran pantalla para hablar de la vida, el universo y de todo en un inusual documental para cine coproducido por el Vaticano, anunciaron el miércoles ejecutivos del estudio
Escrito y dirigido por el nominado al Óscar tres veces Wim Wenders, «Pope Francis. A man of his word» (Papa Francisco. Un hombre de palabra) se estrena en Estados Unidos el 18 de mayo, informó la productora californiana Focus Features.
En el documental, una coproducción casi inaudita entre el Vaticano y cineastas externos, el papa se dirige al público directamente para hablar sobre inmigración, ecología, la desigualdad de la riqueza y el papel de la familia.
«Los conceptos visuales y narrativos directos ante la cámara comprometen a la audiencia cara a cara con el papa, creando un diálogo entre él y, literalmente, el mundo», dijo un portavoz en un comunicado.
«A partir de preguntas de personas de todos los ámbitos, el papa Francisco responde a granjeros y trabajadores, refugiados, niños y ancianos, reclusos y aquellos que viven en favelas y campamentos de inmigrantes», agregó.
La película muestra al pontífice de 81 años viajando por el mundo, hablando en Naciones Unidas o dirigiéndose al Congreso de Estados Unidos y en el memorial de Yad Vashem en Jerusalén, dedicado a la memoria del Holocausto.
También aparece hablando a prisioneros y refugiados en campos del Mediterráneo y visitando los territorios palestinos e Israel, así como África, América del Sur y Asia.
«El papa Francisco es un ejemplo viviente de un hombre que defiende lo que dice. En nuestra película, habla directamente al espectador, de manera muy cándida y espontánea», dijo Wenders en un comunicado el año pasado, cuando el proyecto se anunció por primera vez.
Focus dijo que Universal Pictures International distribuirá la película en el extranjero, aunque aún no hay detalles sobre el calendario de lanzamiento mundial.
El exarzobispo de Buenos Aires, nacido como Jorge Mario Bergoglio en la capital argentina en diciembre de 1936, pasó de un modesto comienzo antes de convertirse en el primer líder latinoamericano de una iglesia con 1.200 millones de fieles.
AFP