El pasado episodio de la serie The Walking Dead de AMC estuvo intenso de principio a fin, con momentos de mucha ansiedad, sustos y muertes inesperadas. Además de que gastaron galones y galones de tinta roja (sangre).
Fácil puede ser descrito como el mejor episodio de esta segunda parte de la quinta temporada de la serie.
Finalmente conocemos la verdadera cara de los residentes de “Alexandría”. Quedó al descubierto que son unos cobardes. Han logrado sobrevivir en el apocalipsis zombie porque cada vez que hay alguien en problemas los abandonan y huyen. Así cualquiera. No tienen ni pizca de sentido de solidaridad. Así fue como (¡SPOILER!) perdimos a Noah (Tyler James Williams) este lunes, y de la manera más terrible.
Por la irresponsabilidad de Aiden el hijo de Deanna, líder de Alexandría, Noah murió, el mismo Aiden murió y Tara está entre la vida y la muerte.
La muerte de Noah fue terrible. Los walkers se lo devoraron por culpa de Nicolas y a Glenn no le quedó más remedio que verlos morir frente a él.
Eugene, finalmente, reaccionó y se convirtió en uno de los héroes de la serie. Mientras que el padre Gabriel ve a Rick y a los suyos como asesinos y así habla de ellos.
Carol, lamentablemente, se enfrenta nuevamente a la violencia doméstica, en esta ocasión como observadora y no víctima. Pero sabemos que Carol, hace tiempo, dejó de ser víctima y de seguro tomará el control de la situación o buscará que Rick se haga cargo de la situación.
Fuente: AlMomento360
