Unos 25 estudiantes de la Universidad Católica Andrés Bello se instalaron ayer en las puertas del Ministerio de Interior, Justicia y Paz, en la Av. Urdaneta, para exigir justicia por su compañero asesinado el miércoles, Adrián Sanjuan, de 22 años, en Bello Campo.
Llegaron vestidos de negro y con rosas blancas en la mano para hacer un llamado de atención al ministro Miguel Rodríguez Torres, pues consideran que el alto índice delictivo que azota al país, va más allá de un plan de seguridad con militares.
Los universitarios se sentaron frente a la sede ministerial y elevaron una voz de protesta. Minutos después, fueron atendidos por el viceministro de Seguridad Ciudadana, Manuel Díaz, con quien se reunieron durante 45 minutos para discutir el tema de la seguridad en el país.
«El viceministro nos dijo que actualmente tenemos un plan de seguridad con policías y militares, pero cuestionamos su postura porque no basta con eso, creemos que hace falta mayor compromiso desde el punto de vista criminalístico para poder solventar este problema que nos ataca a todos, no solo a los estudiantes», dijo Ana Karina García, consejera estudiantil de la UCAB.
En relación a señalamientos que hiciera el ministro en contra de universitarios, a quienes acusó de generar la violencia en la UCV y causar destrozos, los jóvenes respondieron que «así como tiene la inteligencia para encontrar culpables en casos como los de la UCV, así exigimos que consiga a los delincuentes que asesinaron al compañero Ucabista en Bello Campo».
Fuente: EU
