¿La situación no da para más? ¿Vos súper ordenada y el terrible desorganizado? ¿O es al revés? Sea como fuere, alguno de los dos tiene que poner un orden, y si vos vas a ser la encargada tenés que conocer estos consejos.
Para no volverte loca y no morir en el intento de ordenar todo lo que suelen usar los dos, lo mejor que podés hacer es tomar nota de estos 5 consejos para que tu pareja sea más ordenada. ¿Estás lista para conocer la solución a tus problemas?
1. Bajar las expectativas
Hay un punto importante que tienes que entender: hay gente a la que le interesa el orden y otra a la que simplemente no. Seguramente antes de convivir sabías que esto podía llegar a generar un problema, y por eso te recomendamos que si tu pareja es de esas personas, no le hables sin parar del tema. No decimos que pueda ser un desordenado sin reparos, pero mientras cumpla con ciertas normas, tampoco lo vuelvas loco. Sino será un problema sin fin.
2. Que la llegada a tu casa no sea una batalla campal
¿Te acuerdas de todos los ejercicios de respiración que aprendiste a lo largo de toda tu vida? ¡Es hora de aplicarlos! Si llegás a tu casa y todo es un caos, no te desesperes ni bien entras. Saludá a tu pareja, charlen un rato y después tranquila proponele ordenar un poco la casa juntos. La idea es que la otra persona se concientice sobre el problema, no que se griten y discutan ni bien se ven. No crees un desorden en tu vida amorosa por un desorden material.
3. Pide cosas puntuales
De a pasos pequeños quizás logres algo increíblemente grande, ¿no te parece? Para no abrumar a la otra persona con la limpieza de todo lo que se te ocurra que puede estar sucio, hacele una lista de cosas que quedarán a su cargo. ¿Te parece buena esta idea?
4. Ocúpate tú del orden y él de otra cosa
¿Se tornó imposible? No creemos que sea una situación que no puedas solucionar. Nuestros consejos es que se repartan las tareas para que todo sea equitativo. Vos ordenás, el va al súper y se encarga de cocinar. Capaz no sea tan mal trato, ¿no?
5. Ordenar juntos
Dediquen un momento de la semana a ordenar la casa. Mientras uno limpia un sector, el otro se ocupa de otra parte. Pongan música, canten fuerte y verán cómo algo que parece aburrido puede ser una experiencia genial.
Si ya no sabés cómo hacer que tu pareja ordene, ¡podrías empezar a poner estas ideas en práctica! Lo mejor es que puedas manejar esta situación sin que te agarre un ataque de estrés y logren el cometido final: la limpieza y la armonía en la convivencia.
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