José Luis Isase, presidente del Sindicato Único de Trabajadores del Transporte del Estado Nueva Esparta (Suttene), ha alzado la voz para denunciar esta situación que afecta gravemente a los trabajadores del volante.
Durante una reciente reunión con la Coordinadora Regional del Ministerio de Transporte, se reveló que los transportistas, incluidos mototaxis, taxis, autobuses y vehículos de cinco puestos, reciben apenas un 30% del combustible que se les asigna.
El resto de los litros destinados a estos trabajadores queda bajo el control de Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), generando una gran incertidumbre sobre su destino final.
Según el decreto presidencial emitido por Nicolás Maduro, el transporte público debería recibir 120 litros diarios de combustible subsidiado durante todo el mes.
Sin embargo, la realidad es otra: el surtido se limita a tres días a la semana, dependiendo de si las placas son pares o impares.
En este esquema, los autobuses reciben un máximo de 100 litros, los taxis 28 litros, las mototaxis 10 litros y los vehículos de cinco puestos 40 litros.
Isase cuestiona el paradero del 80% del combustible que supuestamente se surte.
«Si el surtido es solo tres días a la semana, Pdvsa se queda con el combustible de 18 días al mes. ¿Dónde está el 80% del combustible que dicen que surtimos?», exclamó, exigiendo respuestas a las autoridades responsables.
El líder sindical ha acusado directamente a Pdvsa y a otras autoridades de desviar el combustible destinado al transporte público hacia otros sectores, obligando a los transportistas a cubrir sus necesidades con recursos propios.
«No surtimos todos los días ni recibimos los litros asignados. No llegamos ni al 30% de lo que nos corresponde», afirmó Isase.
La situación ha captado la atención del propio ministro de Transporte, quien se comunicó con Isase para investigar la reducción en la asignación de combustible, lo que indica que el problema ha escalado a nivel nacional.
En otro ámbito, el pasado viernes se aprobó un ajuste del 40% en la tarifa urbana tras una reunión nacional entre el Ministerio de Transporte y la Vicepresidencia de Servicios Públicos.
La tarifa, que era de 18 bolívares, pasará a ser de 25 bolívares. Sin embargo, su implementación aún depende de las decisiones de las alcaldías locales.
La crisis de combustible en Nueva Esparta continúa generando preocupación y descontento entre los transportistas, quienes demandan transparencia y soluciones efectivas para poder cumplir con su labor diaria sin obstáculos adicionales.
Fuente: Reporte Confidencial