Jhonny Magdaleno, presidente de Fetracarabobo, aseguró que la principal demanda de la mano de obra en la entidad es la reactivación de la discusión tripartita entre el sector
Jhonny Magdaleno, secretario general de Fetracarabobo (Foto: Archivo El Carabobeño)
La palabra tripartita, en hechos y acciones, es la que esperan los trabajadores de Carabobo que esté incluida como prioridad en el plan de gobierno de quien gane la elección presidencial del próximo 28 de julio.
Jhonny Magdaleno, presidente de Fetracarabobo, aseguró que la principal demanda de la mano de obra en la entidad es la reactivación de la discusión tripartita entre el sector empresarial, los trabajadores y el gobierno, con el objetivo de revitalizar el aparato productivo y mejorar las condiciones salariales y laborales.
Magdaleno subrayó que los trabajadores están dispuestos a colaborar con el próximo gobierno para establecer mesas de trabajo y contribuir a la reactivación del aparato productivo.
“Necesitamos la implementación de una política de ganar-ganar a través de la tripartita entre el sector empresarial, los trabajadores y el gobierno. Eso es esencial”.
La exigencia principal en esas mesas de trabajo en cuyo establecimiento confía, será la reactivación del aparato productivo, “lo que permitiría no solo la creación de empleo, sino también la posibilidad de obtener salarios dignos y contratos colectivos que reflejen las necesidades y derechos de los trabajadores”.
Carabobo el más afectado sin tripartita
Durante las últimas dos décadas sin tripartita, Carabobo ha sido testigo de un drástico deterioro en su parque industrial. Magdaleno destacó que, en el pasado, la zona industrial de Valencia albergaba hasta seis mil empresas, pero hoy en día solo quedan operativas alrededor de dos mil, de las cuales solo un 20% son pequeñas y medianas empresas.
La reducción de actividades industriales ha provocado un aumento significativo del desempleo y ha dejado a miles de trabajadores sin sustento.
El sector automotriz de Carabobo, que alguna vez fue un pilar económico, está completamente paralizado. Las plantas de Ford, General Motors y Chrysler, que solían emplear a miles de trabajadores, han cerrado sus puertas, dejando un vacío económico y social.
Magdaleno enfatizó que la reactivación de estas plantas se puede lograr con mesas de trabajo tripartitas para generar más de 150 mil empleos directos e indirectos, impulsando significativamente la economía local.
Además de la industria automotriz, otros sectores como la educación y la construcción también han sufrido un grave deterioro. “Los educadores enfrentan un déficit importante y exigen una distribución justa de la riqueza. La construcción, que alguna vez fue un sector vibrante, ha disminuido en más del 80%, afectando aún más el empleo y la infraestructura en Carabobo”.
Magdaleno insistió en que se esperan cambios políticos en el país para que, con un esfuerzo conjunto y decidido se supere la crisis para devolver la prosperidad a Carabobo y a toda Venezuela.
El Carabobeño