Más de trece asociaciones no gubernamentales, médicos residentes y profesionales afines se encuentran a las afueras del Centro Financiero Latino, en la avenida Urdaneta (Caracas), donde funciona la sede de la Defensoría del Pueblo para presentar a la defensora Gabriela Ramírez un documento que expone las «precariedades del sector salud».
«Solicitamos la intervención de la densora ante la crisis del sistema nacional de salud, por significar este un derecho de todos los venezolanos», manifiestan.
Piden solucionar el severo desabastecimiento de insumos y medicamentos, el cierre de laboratorios públicos y privados, el hacinamiento de hospitales, así como la suspensión de servicios en los mismos por déficit de camas, falta de equipos y obras inicuadas en los mismos que no han sido culminadas.
Asimismo, la violación de derechos laborales que ha significado la pérdida de profesionales especialistas en diversas áreas del sector. Manifestaron su preocupación por la «ineficiencia» en la distribución del presupuesto de los programas que afectan a los más pobres porque se han tenido que recurrir a servicios privados.
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