Encontraron cinco nidos, con aproximadamente 550 huevos en esa playa de Camuri Grande que están resguardando junto a la comunidad y los surfistas. Según una funcionaria, la tortuga agredida regresó dos días después y logró desovar.
Funcionarios del Ministerio del Ambiente, junto con grupos ecologistas de la zona, realizaron una inspección a Playa Pelúa, en Camurí Grande, que fue escenario de una documentada agresión a una tortuga cardón (Dermochelys Coriácea) que intentaba desovar. Después de forzarla a detener la liberación de huevos, dos pobladores de la zona intentaron arrastrarla por la aleta. La tortuga fue rescatada por un grupo de surfistas que, además de ayudarla a regresar al mar, tomaron fotos de lo ocurrido.
La inspección liderada por la dirección estadal de Distrito Capital y Estado Vargas del Ministerio Popular para el Ambiente duró dos días y constataron que era cierta la denuncia, realizada por ecologistas de la comunidad y replicada en eluniversal.com ( http://www.eluniversal.com/vida/140617/impiden-desove-de-tortugas-cardon-en-playa-de-vargas ).
El jefe de la dirección estatal del Distrito Capital y Estado Vargas, Yonatthan Torres, admitió que efectivamente disponen de evidencias de la agresión sufrida por la tortuga por parte de dos vecinos de la zona. Manifestó que «no podemos seguir cometiendo este tipo de acciones contra nuestras especies indefensas, nada hacemos con mantener un Programa de Conservación de Tortugas Marinas, si personas inescrupulosas se dedican atacar de esta forma a un animal tan expuesto».
Aunque los dos atacantes están completamente identificados debido a las fotografías tomadas, en ninguna parte del comunicado del ministerio se refieren a sanciones o al menos una investigación para los agresores. Tampoco se habla de la fiscalización del área por parte de las autoridades policiales o militares. Sólo se remiten al adiestramiento y responsabilidad de la comunidad para la protección de las tortugas.
«Trabajamos en el adiestramiento de la comunidad varguense, a través de talleres de capacitación sobre la conservación de las tortugas marinas, además estamos apoyando a la escuela de surf Blue Sea en la creación de un grupo ecologista como promotores en defensa de estos quelonios. La comunidad debe empoderarse en el cuidado de nuestra fauna, es un compromiso de todos», dijo Torres.
En la inspección los funcionarios conversaron con miembros de la Federación de Surf Distrito Capital, quienes fueron los que se enfrentaron a los agresores, a quienes vieron mientras surfeaban en esa playa.
Yolimar Rodríguez, funcionaria del Ministerio del Ambiente, informó también que en esa oportunidad «la tortuga entró al mar sin desovar pero 48 horas después regresó y lo efectuó». También anunció que encontraron cinco nidos en esa misma arena, «que tenemos en custodia con representantes de la comunidad». Se calcula que entre todos suman 550 huevos apróximadamente, con fecha de eclosión para agosto.
Añadió el comunicado que los nidos se encuentran en condiciones naturales, «pero con vigilancia permanente de los habitantes de la zona y grupos surfistas que realizan recorridos en horas del día y la noche». Como se dijo antes, no se menciona si funcionarios policiales o militares participarán en estas labores de vigilancia.
Giorgio Marín, de la escuela de Surf Blue Sea y defensor de la fauna indicó que «estamos preocupados por la poca sensibilidad de algunos de nuestros vecinos, el nacimiento de la tortuga marina es difícil no seamos partícipes en su extinción, por lo contrario, ayudémosla si al salir del mar se encuentra desorientada, no solo a ella, cuidemos sus nidos, seamos humanos».
En otra inspección realizada en Playa A, ubicada en Naiguatá, se detectaron huellas que indican la presencia de alguna tortuga, pero sin rastros de nidos, por lo que se estarán realizando recorridos regulares en el litoral costero.
GIULIANA CHIAPPE | EL UNIVERSAL
