Testimonio: “Primera vez que escuchamos tantos tiros juntos”

Testimonio: “Primera vez que escuchamos tantos tiros juntos”

Los vecinos no salen del asombro tras el doble asesinato de este martes en la madrugada en el sector Ciudad Bendita, en la vía a Upata.
Entre lunes y martes fueron asesinadas siete personas, seis de los hechos se suscitaron en San Félix y uno en Puerto Ordaz. En lo que va del año 124 personas han perdido la vida de forma violenta.

 

Contrario a la madrugada de hace dos días, el silencio es inminente en el sector Ciudad Bendita, adyacente al asentamiento campesino Carlos Manuel Piar, de la vía a El Rosario. Las puertas de las viviendas están cerradas. Uno que otro habitante se asoma por un huequito tras oír el sonido de un carro.

 

La madrugada del martes sucedió algo que se mantendrá muy vivo en sus memorias, y el temor por hablar sobre lo sucedido es evidente.

 

“Ese poco de tiros sonaron desde las 2:30 de la madrugada. Imagínate uno que vive en estas casas que son de zinc. Ese sonido estremeció todo y como uno no tiene para dónde correr nos metimos debajo de la cama”, relata una de las vecinas de Irwin Marcano, conocido como ‘Pepe’, uno de los dos jóvenes masacrados el martes.

 

Marcano, de 26 años, fue asesinado junto a Jhon Peter Díaz, de 19 años de edad, los jóvenes fueron sacados desde su vivienda y puestos boca abajo. En el lugar quedaron aproximadamente 40 casquillos, calibre .40 y 9 milímetros.

 

Gritos…
La incertidumbre deambula en la comunidad. Una vecina salía de su casa con un destino claro, pero se desvió por unos minutos hasta donde ocurrió el hecho, y en frente de la casa narró -midiendo minuciosamente cada palabra- cómo vivió el ataque desde su hogar: “Todos estábamos durmiendo, al escuchar ese poco de tiros, nos levantamos asustados y nos escondimos, ¿qué más podíamos hacer?”.

 

“A los minutos escuchamos los gritos de la mamá de Irwin. Eso daba miedo y tristeza. Nos asomamos, pero no se veía nada porque esto es muy oscuro, pero luego logramos entender lo que había pasado”, añadió.

 

Un grupo de vecinos reunidos en la escena del crimen el miércoles aseveran no saber cuántos fueron los atacantes, pero admiten que un carro se marchó a toda prisa del sector, “y eso es bastante difícil aquí porque la vía es bastante mala”.

 

La mamá de Irwin vivía a pocos metros de él, solo los separaba una pequeña cerca de alambres, en una casa de madera.

 

Este miércoles ambas puertas estaban totalmente cerradas, mientras que aún una de las sábanas con los que fueron tapados los cuerpos se mantiene a la espera de que la brisa se la lleve…

 

“Uno los veía pasar a jugar por aquí cerca, pero hasta ahí”, explicaron. “A uno lo están velando para La Victoria y el otro en El Roble”.

Hipótesis
Por un problema en el barrio La Victoria, en San Félix, cuando visitaba a su novia, Jhon Peter se mudó hace meses a la casa de Irwin. Eran amigos desde la infancia.

 

Hace meses fue herido de bala, “él solo le ocasionó un problema al otro”, comentaron los vecinos.

 

 

Pableysa Ostos

Correo del Caroní

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