La policía lanzó gases lacrimógenos para tratar de dispersar a los manifestantes.
Miles de manifestantes que salieron a las calles del distrito de Besiktas en Estambul se enfrentaron a la policía este domingo en la tercera noche seguida de choques en la ciudad turca.
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Los agentes lanzaron chorros de agua a presión y gases lacrimógenos a la multitud para tratar de dispersarla.
Previamente, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, volvió a criticar a los manifestantes a los que calificó de antidemocráticos.
Erdogan rechazó las acusaciones que le hacen de que su gobierno es autocrático e islamista y señaló que durante su mandato, la economía del país ha hecho grandes avances.
Además, aseguró que los manifestantes son grupos marginales respaldados desde el extranjero.
Fuente: BBC
