Para muchas personas supondría un drama y quizás no sabrían como organizar de nuevo sus vidas, pero lo cierto es que la aplicación del momento, WhatsApp, también puede vetar a determinados usuarios. No es lo frecuente y pocas veces pasa, hasta que ocurre. Así lo contemplan los términos y condiciones del servicio, una ristra de tecnicismos en inglés que nadie lee pero en las que WhatsApp deja bien claro en qué supuestos puede cortarte el servicio.
En concreto, según las condiciones del servicio, los usuarios de la popular red de mensajería instantánea se comprometen expresamente a cumplir con todas las especificaciones de la compañía porque, en caso contrario, como apunta el primer punto de estas cláusulas, «si opta por no estar de acuerdo con estos términos, no podrá utilizar el servicio».
ABC