Aunque existe una mayor apertura en los medios de comunicación y en las sociedades, en general, aún existe un poco de tabú sobre lo que rodea algunas prácticas íntimas yfantasías sexuales; ejemplo, el masoquismo.
Un estudio realizado por la Universidad de Montreal,afirma que la mayoría de las fantasías sexuales que pueden parecer preocupantes para la persona que las imagina, en realidad son más comunes de lo que cree. De acuerdo al análisis realizado a mil 516 adultos, 64, 4 % de ellos tienen una inclinación y deseo a serdominados sexualmente.
¡Deja libre tu mente!
La creatividad de una mente libre de prejuicios y miedos puede ser infinita. Sin embargo, si tú deseas saber si tienes fantasías masoquistas, te damos algunas claves para averiguarlo, con información de un trabajo realizado por Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y SIDA (Censida).
1. Buscas. Las sensaciones de orden y control de los acontecimientos, contra los impulsos propios y ajenos de naturaleza caótica.
2. El abandono temporal o permanente de las propias responsabilidades. Sobre todo cuando éstas resultan muy agobiantes. Te sientes libre cuando el otro toma control de todo, incluso del placer de ambos.
3. Tormento placentero. Encuentras alivio de las sensaciones de culpa a través del castigo.
4. Es analgésico. Las endorfinas que el cerebro secreta como respuesta ante el dolor y temor, también están presentes en estas fantasías, y su resultado es el mismo: tranquilizan.
5. Tentación irresistible. Te lleva a sentir un deseo y excitación sexual difícil de soportal, y la cual te parece tan placentera como una caricia.
Cuando el masoquismo busca la propia destrucción, rechazo o abandono, suele considerarse un indicio de patología mental o de tendencias suicidas. En cambio, cuando busca la propia realización a manos de una persona con la que se mantiene un vínculo emocional, constituye una manifestación erótica”, indica una investigación de Censida.
Recuerda que en la sexualidad todo está permitido, siempre que exista respeto yconfianza en la pareja. ¡Cuídate!
Fuente: Salud180
