«Creo en la lucha por los derechos LGTBI y cualquier forma de discriminación basada en la orientación sexual o el género es incorrecta», dice la cantante sobre la candidata republicana al Senado, Marsha Blackburn
La cantante Taylor Swift caminando en Nueva York, en junio de este año. GTRESONLINE
En el último tiempo Hollywood se ha convertido en un hervidero político. En cuanto Hillary Clinton se presentó como candidata a la presidencia de los Estados Unidos en 2015, fueron muchos los famosos que no dudaron en demostrar su apoyo a la demócrata, tanto en redes sociales como en eventos de su campaña. La candidatura de Donald Trump por el Partido Republicano, terminó de dividir a la meca del cine.
Sin embargo, había una voz que se encontraba especialmente callada. La cantante de 28 años Taylor Swift, quien en ese momento era uno de los pilares de la cultura pop y una ferviente defensora del papel de la mujer en la sociedad, extrañamente mantuvo un lapidario silencio durante toda la campaña y el tiempo posterior. Muchos interpretaron su discreción como un tácito apoyo al neoyorquino, especialmente al considerar que Swift proviene de Tennessee, uno de los bastiones del ahora residente de la Casa Blanca.
Ese silencio ha sido quebrantado este domingo, cuando Swift se ha lanzado a su cuenta de Instagram para contar su postura frente a las elecciones legislativas del próximo 6 de noviembre. «En el pasado, me he mostrado reacia a expresar públicamente mis opiniones políticas, pero debido a varios eventos en mi vida y en el mundo en los últimos dos años, me siento muy diferente al respecto», inicia el comunicado que ha compartido con sus 112 millones de seguidores.
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La ganadora de diez premios Grammy ha asegurado que no tiene una inclinación por ningún partido político, y que en realidad vota de acuerdo con el candidato y a la cercanía que este tenga con sus valores. «Siempre he emitido y emitiré mi voto en función de qué candidato protegerá y luchará por los derechos humanos que creo que todos merecemos en este país. Creo en la lucha por los derechos LGTBI, y cualquier forma de discriminación basada en la orientación sexual o el género es INCORRECTA. Creo que el racismo sistémico que todavía vemos en este país hacia las personas de color es aterrador, repugnante y prevaleciente», afirma.
A partir de ahí, la cantante de country se concentra en una candidata en particular: Marsha Blackburn. Esta empresaria y política de 66 años se presentará en las próximas elecciones para representar al estado de Tennessee en el Senado, y sus ideales no concuerdan con los de Swift. «Ella votó en contra de la igualdad salarial para las mujeres», escribe la artista. «Ella votó en contra de la reautorización de la Ley de Violencia contra la Mujer, que intenta proteger a las mujeres de la violencia doméstica, el acoso y la violación en citas. Ella cree que las empresas tienen derecho a rehusarse a atender a parejas homosexuales. Ella también cree que ellos [los homosexuales] no deberían tener derecho a casarse», prosigue en su comunicado.
Para finalizar, Swift admite por qué candidatos votará ella, pero no solicita que sus conciudadanos hagan lo mismo, sino que les pide que se informen sobre los políticos que quieren representar a sus estados y, sobre todo, que vayan a las urnas. «Muchas personas inteligentes, reflexivas y dueños de sí mismos han cumplido 18 años en los últimos dos años y ahora tienen el derecho y el privilegio de hacer que su voto cuente. (…) Para muchos de nosotros es posible que nunca encontremos un candidato o partido con el que estemos de acuerdo al 100% en cada tema, pero debemos votar de todos modos», concluye.
Esta declaración política se produce a dos días de finalizar el registro para las votaciones legislativas y a una semana de que su enemigo público, Kanye West, haya hecho un discurso en el programa Saturday Night Live en favor del presidente Donald Trump. Las declaraciones del rapero generaron tal critica en las redes sociales que días después cerró sus cuentas de Twitter e Instagram.
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