«La investigación de Canserbero marca un precedente en la investigación de carácter penal internacional», así lo destacó el fiscal de la República Bolivariana de Venezuela, Tarek William Saab, sobre el caso de Tirone José González Orama, mejor conocido como «Canserbero», al ser reabierto por parte del Ministerio Público (MP), para esclarecer los hechos de «un supuesto suicidio»; así como hacer justicia a los familiares y amigos de la víctima.
El fiscal detalló que solicitaron 10 diligencias para reconstruir los hechos del asesinato, por lo que, lo primero que ejecutaron fue la exhumación de los restos de Canserbero y Carlos Molnar, amigo y manager de González, para establecer una línea de investigación diferente en el caso, «tomé como referencia, el caso de Carlos Lanz para practicar el mismo plan, para reconstruir desde cero toda la investigación. Inicié con las entrevistas desde el principio, con quienes estuvieron, inclusive los funcionarios policiales», afirmó.
En ese sentido, relató que al momento de realizar la autopsia de los implicados, la patóloga encargada del procedimiento obvió las heridas punzo penetrantes que tenía Canserbero en el costado izquierdo, al asegurar, en el informe, que la causa de la muerte había sido la caída y no las puñaladas causadas por su victimario, lo que convierte esa acción en una pista reveladora en el caso.
Detalles del asesinato
Por último, informó que en el caso Canserbero se realizaron 120 diligencias de investigación, desglosadas en 13 ocasiones, lo que determinó que no fue un homicidio – suicido, sino un asesinato doble, cometido por Natalia Améstica, quien apuñaló a ambas víctimas. Posteriormente, su hermano Guillermo Améstica, busca apoyo con funcionarios policiales para simular un hecho punible a través de una pelea.
EU