Tania Sarabia: “Yo no quiero un homenaje póstumo”

Tania Sarabia: “Yo no quiero un homenaje póstumo”

Con la alegría que la caracteriza, Tania Sarabia contesta el teléfono. Se escucha feliz, emocionada. Sin siquiera preguntarle, ella empieza a explicarlo todo: celebra 40 años de vida artística. Y lo hace en las tablas, como siempre quiso.

 

La actriz venezolana reunió a sus compañeras del teatro y a reconocidos humoristas criollos para la fiesta que este carnaval habrá en el Teatro Santa Rosa de Lima. Pero tenemos Tania es el nombre del montaje que domingo, lunes y martes se estará presentando a las 6:30 pm.

 

Mariaca Semprún, Marialejandra Martín, Caridad Canelón, Gledys Ibarra, Mariangel Ruiz, Carlota Sosa y Amanda Gutiérrez forman parte del cartel de invitados al homenaje que en vida recibirá Sarabia. Claudio Nazoa y Leonardo Padrón también se sumarán.

 

La idea es que la fiesta, dirigida por José Rafael Briceño, se extienda luego y recorra todo el territorio nacional. Porque son 40 años, ininterrumpidos, en las tablas y eso merece celebrarse, como dice Sarabia, con mucha vida.

 

Pero tenemos Tania, ¿un homenaje a su carrera?

 

A la que se le ocurrió la idea fue a Jorgita (Rodríguez). Y yo feliz. Es un homenaje que me van a hacer por mis 40 años de carrera artística. Y yo siempre lo dije: a mí no me van a hacer un homenaje póstumo. Yo lo que quiero es participar.

 

Mucha gente participa en el montaje, incluso usted…

 

Voy a hacer una parte del monologo Los hombros de América. También voy a hacer otra cosa con Claudio (Nazoa). Pero sobre todo, quiero que sepan que estoy muy feliz y agradecida con mis compañeras y amigas actrices. Estoy muy feliz. Todos quieren participar y yo feliz. Dentro de tanto problema y tristeza que vivimos, me da mucha alegría. Y hay una cosa importante que me hace mucho más feliz: una parte de las funciones va a ser a beneficio de Senosayuda.

 

Sigue muy unida a la lucha contra el cáncer…

 

Radicalmente. Yo soy otra Tania antes y después del cáncer. Mi vida cambió. A partir de ese malestar, de esa enfermedad tan radical, pienso distinto. Pienso más en lo demás. Para mí ha sido una lección de vida. Yo quiero ser útil para algo. Ayudar. Pensar en los demás. Yo quiero piezas que tengan un compromiso con mi país, mi sociedad. Aunque sea comedia, si hace reír a la gente, ya estás haciendo un bien. La risa es salud. La gente amargada se enferma y a la gente triste le da gripe.

 

¿Pensó alguna vez que el teatro la ayudaría tanto?

 

En mis inicios, nunca pensé que el teatro iba a crecer tanto. Es algo que me sorprende y me hace muy feliz. La gente se acostumbró a ir al teatro. Eso me impresionó. Nunca pensé que sería así.

 

¿Y que se dedicaría de por vida a las tablas?

 

Siempre tuve claro que nunca me iba a bajar del escenario. El día que me lo quiten, prefiero morirme. Qué aburrimiento. ¿Qué voy a hacer? ¿Cuidar a un loro? Yo adoro mi profesión. La amo. La respeto. Es como una montaña rusa: todo depende de la tenacidad y el esfuerzo. Hay que querer a la gente a la que le dedicas tu acto. Eso te induce a hacer lo mejor que puedes. Yo creo que es una profesión que a la que uno nunca termina de estudiar. Siempre hay un reto y eso me encanta.

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: UN

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