Los talibanes están restringiendo el derecho de las mujeres afganas a trabajar o acceder a servicios determinados por no estar casadas o no ir acompañadas por un miembro masculino de la familia, alertó este lunes en un informe la Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (UNAMA).
La organización registró varios casos entre octubre y diciembre por parte de funcionarios del Ministerio de Propagación de la Virtud y Prevención del Vicio, que impidieron a mujeres «trabajar o (tener) acceso a servicios por no estar casadas o no tener mahram (acompañante masculino)».
El pasado 1 de octubre, «tres trabajadoras sanitarias fueron detenidas porque iban a trabajar sin mahram». Fueron puestas en libertad después de que sus familias «firmaran una garantía por escrito de que no repetirían el acto», indicó la UNAMA.
El pasado 2 de diciembre, «funcionarios de facto del Departamento para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio impidieron a las mujeres sin mahrams acceder a los centros de salud», en la provincia oriental de Paktika, según la organización.
La UNAMA alertó de que las autoridades realizan cada vez más registros en puestos de trabajo para asegurarse de que las mujeres cumplen con los códigos de vestimenta islámicos impuestos por los fundamentalistas.
El 22 de octubre, en la provincia de Nangarhar, las autoridades afganas prohibieron a unas 400 mujeres «trabajar en una planta procesadora de piñones, mientras que a los hombres se les permitía continuar trabajando».
EFE