Lo primero que debes saber es utilizar perfectamente la cámara que vas a utilizar. Recuerda que no es necesario equipo de lujo para sacar buenas fotos. La voluntad de jugar con tu pareja es mucho más importante que tener una impresionante cámara réflex que realiza un sinfín de fotos al minuto. ¿Te acuerdas de las antiguas Polaroid que te sacaban la imagen de inmediato?

Estas son perfectas apara una buena sesión de fotografía erótica. Seguro que te resulta casi imposible conseguir este tipo de cámaras por lo que lo normal es que utilices una digital que te permitirá compartir de manera casi inmediata las imágenes tomadas con cualquier otra persona. Realizar una sesión de fotografía erótica es algo que necesita planificación. Si el juego se realiza con otra persona que actúa como modelo, debes dejarle claro que podrás hacer lo que quieras con las imágenes.

Tómate tu tiempo mirando libros de fotografía erótica para ver cuáles son las mejores poses, qué ropa es la más indicada o qué accesorios te gustaría utilizar. Que no se te olvide que la iluminación es una parte muy importante de cualquier foto, así que estudia con detenimiento dónde vas a realizar la sesión. Lo que utilices para iluminar la sala puede ser muy excitante, como por ejemplo unas velas.

Piensa en el mejor lugar para tomar la foto de antes de empezar a disparar. La ubicación debe ser un lugar privado. Nadie quiere que le molesten mientras está tratando de ser sexy. Mientras que el dormitorio es el lugar obvio para comenzar, trata de explorar otras áreas, como el baño y la cocina, incluso la escalera puede ofrecer posibilidades para conseguir imágenes verdaderamente sexys.

Fuente: Sexólogos

Nos ponemos metas para todo, ya sea perder unos kilos antes de las vacaciones, la fecha que quieres encontrar el trabajo de tus sueños, etc. Pero, ¿cómo te pones la meta de encontrar a la persona que quieres en tu vida?

¿Qué es lo que quieres en una relación, qué cualidades te hacen feliz y cuáles no? La mejor forma de cumplir con cualquier meta que te propongas es hacer una lista y seguirla.

1. No te enfoques en el físico:

Tu lista no debería enfocarse en quién sea guapo o guapa. Puedes escoger a tu pareja a base de su físico cuando estés fuera y buscando. ¿Acaso te enfocas en la decoración de las instalaciones cuando buscas tu trabajo ideal o en la calidad del trabajo?

2. Piensa y reflexiona sobre tus relaciones pasadas:

Tomate un tiempo para recordar tus relaciones pasadas. ¿Qué hacía tu ex que te mantenía feliz? Por algo estabas con él o ella, piensa en las cosas sencillas. También piensa en las cosas por las cuales terminaron, las cosas que no te gustaban de tu ex-pareja. Recuerda las peleas y cualquier cosa que quieras evitar en una relación a futuro.

3. Establece tus no negociables:

Si no quieres salir con alguien sin haber estudiado una carrera, reconoce por qué esto es un atributo no negociable. Las situaciones son variadas entre la gente, pero si es algo que valoras en una persona, capaz quieras que tu futura pareja tenga ese atributo. Pero siempre piensa a largo plazo, por ejemplo: que no se haya graduado de la universidad puede significar que no termina las cosas que empieza. Busca estos atributos en otras facetas de su vida. Si te gustan las personas saludables, quizá no sea buena idea que salgas con alguien que no hace ejercicio. Pero si no terminó la carrera porque empezó con su negocio, no deberías incluir eso a tus no negociables.

4. Enfócate en cómo te quiere sentir

¿Cómo quieres sentirte en una relación? Si no eres el tipo de persona que le gusta que su pareja lo idolatre porque te hace sentir asfixiado, tienes que ser claro con eso. Quieres a una persona independiente o prefieres a una persona que no quiera estar agarrado de la mano contigo todo el día, tu lista tiene que ser bien claro con esto. Pero no te enfoques en los atributos en sí, piensa más en cómo te hace sentir y usa eso como tu base para esta lista para evitar cualquier otro atributo que te haga sentir mal o para que sepas buscar mejor los atributos que te gustaría en tu pareja.

5. Toma tu tiempo:

Cada persona con la que salgas se merece una oportunidad de demostrarte quién son en verdad. La única forma honesta de conocer a alguien es darles tiempo y pasarla con ellos. No existe una forma rápida para conocer a una persona. Pero mientras estén saliendo, evita dejar que las cosas se pongan serias antes de que evalúes tu lista y esta persona de manera constructiva. No podrás saber todo lo que quieres saber en un solo día ni una semana.

Fuente: Caracteres.mx

La excusa más utilizada por los hombres a la hora de no querer ponerse un preservativo es que este método anticonceptivo reduce al máximo su sensibilidad por lo que les resulta muy difícil conseguir placer mientras practican sexo. Otra de las excusas es que el momento de parar para ponérselo es un “corta rollos” que hace muchas veces tener que volver a empezar.

La verdad es que según los expertos el placer con el preservativo es simplemente algo psicológico. Este ha sido el resultado de un estudio realizado en la Universidad de Indiana (EEUU). Dicho estudio se ha realizado con un total de 1.875 hombres hetero. Es curioso como han llegado a la conclusión de que existen varios factores que indican unos mayores niveles de placer cuando se usa el preservativo.

El estudio ha sido publicado por ‘Journal of Sexual Medicine‘. A cada uno de los participantes se les dieron un total de 12 condones, acompañados de una completa guía para su correcta utilización. Durante un mes, los chicos escribieron en un diario sus prácticas sexuales, tanto manuales, como orales, vaginales, anales y el uso del condón.

Cada uno de ellos debía valorar la relación, su estado y su opinión sobre el uso del preservativo. Los resultados han sido algo inesperados para algunos ya que los participantes en el estudio explicaban como con la excitación obtenida por sus parejas, el preservativo no les causa ningún tipo de reducción del placer. Este es uno de los primeros estudios que se realizan en torno a este tema ya que todos parecíamos haber asumido de manera absoluta la reducción del placer al usar el preservativo.

Fuente: Sexólogos.net

Muchas de nosotras leímos Cincuenta sombras de Grey o sabemos que es un éxito mundial, pero no es el único. La literatura erótica suma títulos que vale la pena indagar. Para estimularte, para robar ideas o, simplemente, para pasar un buen rato: una guía con los imperdibles.

Cualquier mujer que se autoreconozca como fanática de la lencería, los juegos sexuales y la cosmética sensorial debería tener en su mesita de luz un libro erótico. Quien sabe de eso es Mariela Tesler Hansen, fundadora de Isabellina, así que armó para Entremujeres un listado de los 10 títulos imperdibles:

 El huracán lleva tu nombre, de Jaime Bayly

Es una singular historia de amor, dolorosa y gozosa a la vez. La heroína, Sofía, fascina por su capacidad de amar y el original antihéroe, Gabriel, expone al lector su conflicto a través de una sinceridad a veces hilarante y a veces conmovedora. Una novela que no va a dejar a nadie indiferente.

 Memorias de una geisha, de Arthur Golden

De la mano de Sayuri entraremos un mundo secreto dominado por las pasiones y sostenido por las apariencias, donde sensualidad y belleza no pueden separarse de la degradación y el sometimiento. En este mundo, las jóvenes aspirantes a geishas son duramente adiestradas en el arte de la seducción. Su virginidad se venderá al mejor postor y tendrán que convencerse de que, para ellas, el amor no es más que un espejismo.

 Cincuenta sombras de Grey, de E. L. James

Es una novela erótica publicada en 2011. Narrada en gran medida en Seattle, es la primera entrega de una trilogía que describe la relación entre una recién graduada de la universidad, Anastasia Steele, y un joven magnate de negocios, Christian Grey. Se destaca por sus escenas explícitamente eróticas, con elementos de las prácticas sexuales que involucran bondage/disciplina, dominación/sumisión y sadismo/masoquismo.

 El otro lado del sexo, de Valérie Tasso

La autora de Diario de una ninfómana es toda una autoridad en materia de sexo. Estas y otras experiencias se recogen en este itinerario por las prácticas eróticas menos conocidas y sorprendentes.

 Cartas eróticas, de James Joyce

Es la recopilación de la correspondencia íntima que mantuvieron el autor de Ulises, James Joyce, y su esposa, Nora Barnacle. Su publicación estuvo prohibida por sus descendientes hasta enero de 2012, dado el tono perverso de estas cartas.

 El amante de Lady Chatterley, de David H. Lawrence

Es una de las primeras obras maestras de la literatura erótica. Durante mucho tiempo se vendió una versión censurada, pero ya se puede conseguir completa.

El affaire Blackstone, de Raine Miller

Ethan Blackstone es un hombre rico, sexy y protector. Dirige su propia compañía de seguridad privada y está inmerso en la organización de los Juegos Olímpicos 2012. Brynne Bennet es una chica americana con un pasado que la aterroriza y por el que recibe tratamiento psicológico. Es una trilogía que contiene erotismo, sexo, control y misterio que hace imposible detener su lectura hasta llegar al final.

 El límite del placer, de Eve Berlin

¿Hasta dónde estás dispuesta a llegar para conocer los límites de tu placer? Para la protagonista de esta novela, Dylan Ivory, el control lo es todo. Ella lleva una vida organizada, segura, estable, sin riesgos… Hasta que se encuentra con Alec. Este hombre es todo lo contrario a ella, pero es todo lo que realmente quería ser.

 Bajo las sábanas, de Kristina Wright

Este libro reúne 17 relatos en los que colaboran los mejores autores del género: Sylvia Day, Donna George Storey, Heidi Champa, Delilah Devlin, Saskia Walker, Justine Elyot, Kate Pearce, Erobintica y Nikki Magennis. Son historias de parejas que deciden llevar a cabo sus fantasías más atrevidas, que huyen de la monotonía o que buscan la complicidad de una tercera persona.

 Siete años para pecar, de Sylvia Day

En esta oportunidad, la autora explora el deseo y la intimidad de una forma reveladora. La historia trata de un joven que se ve obligado a vender su cuerpo a cambio de dinero. Una muchacha recatada es testigo de este acto, y siete años más tarde se reencuentran para calmar la atracción que surgió en ese momento. En ese encuentro descubren que esperar valió la pena.

Fuente: entremujeres

Muchas personas o parejas acuden a las fotografías sexuales como un juego erótico más. Una manera de encender la llama, sea en la cama o por medio de los envíos telefónicos. Pero sacarse fotografías desnudos, o demasiado sugerentes, además de ser sensual, puede convertirse en un riesgo para la intimidad.

Una mala intención o una tecla mal presionada pueden ser simple disparador para un escándalo o vergüenza de ventilar la intimidad. Antes de entregarte al juego de las fotografías eróticas, ten en cuenta los siguientes consejos para sacarse fotos sensuales.

Cómo sacarse una foto sexy

Si envías una foto sugerente a alguien, el gran riesgo es que pretenda más de esas fotografías. Por lo tanto, lo mejor es sólo compartir fotos que te hagan sentir orgullosa o con aquellas con las cuales estarías de acuerdo de que otros la vean.

Cubrir ciertas partes del cuerpo

Si decides tomarte una foto desnuda, tú decides qué parte quieres mostrar y cuál cubrir. Sólo muestra las partes con las que te sientas cómoda.

¿Son más seguras las fotos impresas?

Una fotografía digitalizada puede ser enviada por email o desde el teléfono, mientras que una impresa puede no ser tan sencilla de difundir. O eso es lo que se cree, porque con un simple paso por el escáner puedes correr el mismo riesgo.

¿Qué color de lencería elegir?

Si una mujer decide posar de manera sensual usando sólo lencería, cualquier color resultará excitante. Pero por regla general, trata de evitar el color negro o blanco puro.

Riesgos en el futuro

Imágenes de este tipo, y que sean publicadas, puede que te perjudique de alguna manera en el futuro. Puede afectar tu reputación en caso de que aspires a un determinado empleo, por ejemplo.

Claro que la vida es un tren de riesgos, y depende de una misma cuáles son los que prefiere correr. Sacarse fotos desnuda o no es una decisión personal.

Pero ten cuidado con usar demasiado la tecnología: puede arruinar tu vida amorosa.

Fuente: ActitudFem

Hacer cosas nuevas, tener sexo con un desconocido, el morbo de un sexo obligado o con más de una persona del sexo opuesto, incluso con alguien del mismo, son algunas de las fantasías sexuales femeninas más comunes.

Los sueños eróticos de las mujeres, ya se tengan durmiendo o en vigilia, no sólo cumplen una función liberadora y psicológicamente placentera. Además, según confirman distintas investigaciones, las mujeres fantaseadoras también tienen una mayor capacidad para tener relaciones sexuales satisfactorias, incluyendo unos orgasmos más intensos.

Es más, tanto hombres como mujeres fantasean durante el coito (alrededor del 71 por ciento), y en lo que respecta a ellas, suelen imaginar que su pareja sea otro hombre o que se encuentra en un contexto erótico distinto, siendo también habitual tenerlas durante la masturbación. Sin embargo, la mayor parte de las fantasías se tienen durante el resto del tiempo.

Soñar despiertas

Sin duda, en cualquier momento puede volar la mente en busca de paraísos sexuales virtuales que complazcan a placer. Por ejemplo, se ha descubierto que durante las ensoñaciones diurnas se elaboran fantasías que expresan los sentimientos y miedos que se sienten, con escenarios más complejos y detallados, sin olvidar posibles argumentos que narran historias normalmente simples, protagonizadas por la pareja o por algún desconocido. Por contra, la influencia de Morfeo no ayuda a montar guiones demasiado historiados, al menos no suele ser la norma, si bien las pesadillas barrocas pueden llevarse la palma en muchas ocasiones.

Por último, durante la masturbación son muchas las mujeres que acostumbran a imaginar que tienen relaciones con su pareja, y lo mismo les ocurre a ellos, con un porcentaje que ronda el 80 por ciento en ambos casos. En este caso, al menos, hombres y mujeres no son tan distintos, aunque excepciones hay a punta de pala…

Fuente: Dr.Sexólogo

Si por casualidad te preguntas cómo es la lencería más excitante, la más incendiaria, la que gusta terriblemente a los hombres nada más verla, en este post hallarás algunas respuestas.

No cabe duda, si el objetivo es la conquista sexual, está más que demostrado que la ropa interior picarona es una apuesta segura. ¿Pero, cuál elegir? La hay sensual, excitante, en plan mimoso, romántico o estilo vampiresa, mujer fatal… y todas ellas tienen su punto siempre y cuando consigas que no parezcan un disfraz.

Por lo tanto, una primera norma para acertar con la lencería femenina es lograr que las prendas se adapten a nuestro cuerpo y personalidad como un guante. O, lo que es lo mismo, huir de prendas poco o nada favorecedoras, estrambóticas o que nos hagan sentir incómodas.

Que deje ver más o menos, es otro punto clave. Es algo sabido que siempre resulta más sugerente dejar lugar a la imaginación, pero las tangas no son muy tapadas, precisamente, y sin embargo resultan de lo más sexys.

Curvas seductoras

Otro aspecto fundamental para seducir con la lencería es fijarnos en cómo sientan a nuestras curvas. Si las realza, estamos de enhorabuena, y lo más seguro es que tu chico se encienda nada más verte y no tarde en quitártela.

Hablando de prendas concretas, además del tanga, los culottes son una opción elegante que no tiene por qué resultar menos atrayente. Y, por supuesto, tenemos las ligas, las medias, los picardías o los conjuntos de braguita y sujetador de diseños irresistibles.

Elijas lo que elijas, no olvides variar estilos y modelos para sorprender a tu pareja. No en vano, el factor sorpresa es un importante elemento de seducción, pero también has de saber qué lencería mostrar en cada momento para no desentonar y, al tiempo, provocar estragos.

Fuente: Sexólogos

A quién envíes las fotografías subiditas de tono es cosa tuya, tan privada como las mismas imágenes. Así, a bote pronto, se me ocurre que podrías enviar fotos eróticas a tu pareja, a tus nuevas conquistas o, por qué no, a las futuras… Lo que la aplicación móvil SnapChat sí controla, y mucho, es el tiempo de visionado.

Al más puro estilo de las pelis de acción e intriga, la imagen se autodestruye en unos pocos segundos, que oscilan de uno a diez, en función del tiempo programado. ¿Pero, con qué fin? Tan efímera visión viene acompañada por una cuenta atrás desde que presionamos el botón de visualización, y al mismo tiempo bloquea la función de pantallazo en el teléfono para evitar una posible difusión viral.

Dos estudiantes de la Universidad de Stanford, Bobby Murphy y Evan Spiegel, crearon esta aplicación móvil de sexting como trabajo final en una de sus asignaturas, sin ni siquiera imaginar que el éxito iba a ser tan arrollador: la han usado millones de personas, con un tráfico de 50 millones de mensajes diarios.

El borrado no es total

Sin embargo, esta aplicación no es totalmente segura, pues siempre se pueden hacer fotografías durante esos escasos segundos, un tiempo suficiente para hacer un rápido clic con otra cámara convencional o con la de otro móvil. Además, si bien las imágenes se borran en el dispositivo de destino, no tenemos la garantía de que también desaparezcan en el servidor de la aplicación.

La descarga para iPhone es gratuita a través de la App Store, pero ten siempre en cuenta estos pequeños fallos a la hora de decidirte a enviar una foto de contenido sexual. Recuerda que la privacidad total no está garantizada, así que mucho cuidadín.

Fuente: Sexólogos

Es fin de semana, sales guapísima y vas a tu antro favorito con tus amigas; música, baile, tragos coquetos y llega ese amigo con beneficios de ojos pispiretos y cuando menos lo piensas, ya estás bailando con tu hombre favorito ¿Qué es lo siguiente?

Es noche de copas y las cosas comienzan a encenderse un poco, manita por aquí y piernita por allá, total, ¡terminas en su casa y más enamorada que nunca! Pero oh problema, este hombre te gusta tanto que no quieres que todo termine aquí, así que checa estos consejos que te ayudarán a que tu ‘date’ se convierta en una relación estable.

Toma nota

Hazle un cumplido. No importa si no fue lo que esperabas; en primer lugar estaban pasaditos de copas y en segundo, ya tienes tiempo y la confianza suficiente como para decirle lo bien que se ve .

Ponte su camisa. Así como el las películas; le va a encantar que lo hagas, pues después pasar un raro romántico juntos aprovecha para ir al baño, es el pretexto perfecto para caminar sexymente por toda la casa.

Recuperen los líquidos perdidos. Después de la actividad física es normal estar cansados y sudados, así que hay que recuperar toda el agua que perdimos. Levántate por un vaso de agua para ti y uno para él; podrá darse cuenta de lo considerada que eres.

Aleja la confusión. Se acabó toda la acción, ¿es momento de partir? Esto depende de si te da alguna señal para que te quedes con él o no, en caso de que no recibas ninguna agarra tus cosas, despídete y retírate, pues seguro estará esperando que des el siguiente paso en la relación y te comportes como una novia absorbente, así que sorpréndelo mostrando lo independiente que eres.

Si te quedas a dormir… Es muy normal que te sientas rara e incomoda al día siguiente, pero no te preocupes, trata de tomar las cosas con calma y verás que todo saldrá bien. Lo que sí debes evitar es abrazarlo cada 5 minutos o besarlo como novia quinceañera, lo único que tienes que hacer es sonreir y ser tú misma, la naturalidad es la clave perfecta.

Fuente: imujer

Preparar la habitación de un hotel o de nuestra propia casa para conseguir un ambiente acogedor, que invite al amor, a la cercanía y, en suma, al sexo, es más fácil de lo que pueda parecer. En realidad, sólo hemos de dejarnos llevar por nuestra intuición para conseguir una decoración perfecta.

Que el entorno nos haga sentir cómodos es fundamental, por eso debemos guiarnos por el instinto para que todo salga a las mil maravillas. Eso sí, quizás sea buena idea seguir unas cuantas recomendaciones muy generales si creemos que pueden ayudarnos a mejorar el resultado. Sí, hablo de cosas tan básicas como una luz tenue, sábanas de raso, un delicado aroma, música suave…

Como en tantas otras áreas de la vida, también aquí las ideas simples suelen ser las más atractivas. Así, en esto de crear un espacio seductor, lo fundamental es conseguir que la habitación sea cálida y, a ser posible, que también destile un halo romántico.

Conseguir una gran noche de sexo depende de muchas otras cosas, en realidad, pero no puede negarse que la decoración juega un papel importante. Por lo tanto, si queremos que no falte detalle deberemos cuidar los cinco sentidos. Por ejemplo, sería interesante poner una música suave o, al menos, evitar que haya ruidos molestos, y por supuesto, tener la habitación recogida, sin trastos u olores molestos de zapatos ni de ambientadores demasiado agresivos.

Velas y pétalos de rosas

Para rizar el rizo, sería perfecto dejar caer pétalos de flores por la cama, en forma de corazón o aleatoriamente, así como poner unas velitas aromáticas (cuidado con la seguridad) que huelan a algo erótico, como Ylang Ylang, pues crearían una atmósfera íntima al mismo tiempo que dispersarían un agradable aroma erótico. O, por qué no, también podemos poner unas gotitas de aceite esencial de esta misma planta en lugares estratégicos, como en las sábanas o en cualquier otro lugar para que se perciba de forma íntima, sólo al acercarse a tal o cuál lugar.

El tacto podemos mimarlo de forma excepcional con unas sábanas de raso o, si no las tienes, con ropa de cama de algodón, que sea suave, a ser posible que no sean nuevas, pues algunas añaden olores sintéticos que molestan. Y, por supuesto, cuida que la habitación haya sido limpiada y ventilada al menos unos minutos para que no falte oxígeno y el ambiente no esté enrarecido.

Y, sobre todo, no olvides que el mejor elemento decorativo también puedes ser tú mismo, si es que estás en la habitación cuando tu pareja llegue. Ya sabes, la imaginación al poder… puedes recibirle de muchas maneras, con ropa sugerente, con el albornoz, recién duchado, en ropa interior, dentro de la cama desnudo o todo lo contrario, muy arreglado o arreglada. Sea como fuere, ten en cuenta que la naturalidad siempre suma puntos en el arte de la seducción.

Fuente: Sexólogos