La explosión del vehículo eléctrico Cybertruck ocurrida el miércoles frente al rascacielos del presidente electo, Donald Trump, en Las Vegas no tiene nada que ver con el equipamiento del coche, según ha afirmado Elon Musk, director general de la compañía automotriz Tesla.
Tras anunciar que su equipo estaba investigando el asunto, el empresario agregó que se ha «confirmado que la explosión fue causada por fuegos artificiales muy grandes y/o una bomba transportada en la plataforma del Cybertruck alquilado y no está relacionada con el vehículo en sí».
«Toda la telemetría del vehículo era positiva en el momento de la explosión», escribió en su red social X.
Musk también señaló que «parece probable que se trate de un acto de terrorismo» y argumentó que tanto ese Cybertruck como el Ford F-150 con explosivos implicado en el atropello masivo de Nueva Orleans horas antes habían sido alquilados a la empresa Turo. «Tal vez estén relacionados de alguna manera», sugirió.
Mientras tanto, FOX5 informa que la Policía está investigando una posible conexión entre los dos eventos.
Poco antes, ABC News reportó citando a un funcionario al tanto de la investigación que el vehículo frente a la torre de Trump tenía en su interior una carga de tipo pirotécnico, y que se está investigando si el conductor pretendía provocar una explosión. Por lo tanto, la Policía está tratando lo ocurrido como un posible acto criminal o terrorista hasta que se determine el motivo y se descarten otras posibilidades.
La explosión frente al edificio que alberga el Trump Hotel dejó una persona muerta en el interior del auto y siete heridos de levedad en las cercanías, según precisaron las autoridades.
Comentando los resultados preliminares de la investigación, Musk indicó que «los malvados cabezas de chorlito eligieron el vehículo equivocado para un ataque terrorista».
«El Cybertruck, de hecho, contuvo la explosión y la dirigió hacia arriba. Ni siquiera se rompieron las puertas de cristal del vestíbulo», escribió.