La secretaria del Sindicato de los Trabajadores del sector Salud, María Ramírez, denunció que paulatinamente se les reduzca la venta de gasolina subsidiada en el estado Táchira a los empleados de distintos centros asistenciales como el Hospital Central de San Cristóbal, Hospital del Seguro Social y Fundahosta.
Ramírez explicó que hace 15 recibieron una notificación que informaba sobre la medida de reducción en la venta de combustible y que de 25 litros que tenían asignados, solo se les surtiría 14, pero denunció que la semana pasada no hubo despacho y que se les dijo que la estación sería objeto de una auditoría.
De acuerdo con la dirigente sindical, la respuesta oficial indicó que desde Pdvsa-Caracas se ordenó hacer una auditoría y suspender la venta de gasolina. «Nos extrañó porque en las épocas anteriores han hecho auditorías y nunca suspendían el combustible al trabajador y los mandaban a otras bombas para surtir mientras se resolvía el problema», detalló María Ramírez.
La representante de los trabajadores de la salud indicó que aunque el surtidor fue activado para los días martes y jueves para repostar 14 litros de gasolina, esto significa que este sector está perdiendo 1.000 litros asignados semanalmente, que les impide en varias oportunidades llegar a sus puestos de trabajo.
Tras esta disminución en la venta de combustible, María Ramírez afirmó que ha habido ausencia laboral, situación que afecta a quienes viven en los municipios más lejanos, quienes deben usar su reducido salario para surtir combustible a precio internacional.
Los trabajadores del Hospital Central de San Cristóbal tiene asignado un transporte, pero es insuficiente para la cantidad de personal que debe asistir a la institución. Sin embargo, este autobús tampoco ha podido surtir gasolina y está paralizado; esta situación también se reporta con ambulancias de otros centros de salud que deben hacer colas para surtirse de gasolina.
Diario de Los Andes