La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó el «trato hostil a periodistas y a medios nacionales y extranjeros», según un comunicado.
La «presión y hostigamiento contra los medios y periodistas» desde que comenzaron las manifestaciones de protesta ha dejado 62 casos de violaciones a la libertad de expresión, según datos publicados por el Colegio Nacional de Periodistas, el Sindicato Nacional de Trabajadores de Prensa y la organización no gubernamental Espacio Público.
De esta cifra, 55 casos corresponden a agresiones contra periodistas durante la cobertura de las manifestaciones en varias ciudades del país suramericano, destacó la SIP.
El presidente de Venezolana de Televisión (VTV), Yury Pimentel, denunció que la sede del canal público fue atacada con artefactos explosivos por grupos opositores al Gobierno que asediaron la sede, instalaron barricadas, incendiaron basura y lanzaron objetos contra los trabajadores de la televisión.
Los periódicos encuentran también dificultades para informar. El Gobierno, expresó la SIP, sigue limitando el acceso a las divisas para que puedan importar papel, tinta y otros artículos básicos que no se fabrican en el país.
La mayoría de periódicos ha tenido que reducir la cantidad de páginas y secciones, mientras una decena de ellos dejó de publicar por falta de papel, aunque continúan publicando en formato digital.
También se ha denunciado que el Gobierno venezolano restringe el acceso a internet y ha bloqueado imágenes en Twitter.
La Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera en Venezuela (Apex) denunció las «agresiones, malos tratos, hostigamiento, amenazas y robos» contra los medios, corresponsales y trabajadores de la prensa y señaló como responsables «a fuerzas del orden e individuos que integraban grupos irregulares».
Desde que se iniciaron el pasado 12 de febrero las protestas contra el Gobierno venezolano, que han dejado 13 muertos, 150 heridos y decenas de detenidos, muchos periodistas, medios oficiales e independientes han sufrido «restricciones directas aplicadas por las autoridades» o actos de violencia el en ejercicio de su labor periodística, señala la SIP.
El episodio más destacado en los últimos días, precisó la SIP, con sede en Miami, fue la revocación de las credenciales a reporteros de la cadena estadounidense CNN en Español, después de que Maduro acusara a este canal de «envenenar con sus mentiras».
Días antes el Gobierno venezolano había apagado la señal por cable del canal informativo colombiano NTN24 por «razones de Estado».
La presidenta de la SIP, Elizabeth Ballantine, del periódico estadounidense The Durango Herald, condenó la «censura oficial».
Por su parte, el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, Claudio Paolillo, del semanario uruguayo Búsqueda, denunció que en Venezuela «se está gobernando en contra de la Carta Democrática Interamericana, la cual establece como principio básico de la democracia el respeto por la libertad de prensa y por los derechos humanos»
ÚN