El gigante energético Shell retiró de las aguas sudafricanas el barco que debía llevar a cabo exploraciones de gas y de petróleo por ondas sísmicas, después de que ese proyecto fuera suspendido por la justicia, anunció la compañía el viernes.
El mes pasado, un tribunal de la ciudad de Makhanda (sur) ordenó a Shell que interrumpiera sus operaciones, atendiendo a una petición de grupos ecologistas, preocupados por el modo en que esos trabajos pudieran impactar en las ballenas y otros animales.
«Como las audiencias ante la justicia sobre el sondeo no han terminado y puesto que las condiciones meteorológicas ofrecen posibilidades limitadas, Shell ha decidido poner fin de forma anticipada al contrato con el barco», declaró un portavoz de la compañía a la AFP.
«Esperamos con impaciencia que termine el proceso legal y buscamos la mejor manera de hacer avanzar el proyecto a largo plazo», añadió.
La enorme embarcación salió de Sudáfrica el martes y se dirige hacia las islas Canarias, en España, según el portal MarineTraffic.
El navío debía extraer datos sísmicos en 3D en más de 6.000 km2 frente a la denominada «Wild Coast» («Costa salvaje») de Sudáfrica, una franja de 300 kilómetros de largo de una gran belleza, dotada de importantes reservas naturales.
Los ecologistas consideran que las exploraciones, que consisten en enviar una onda de choque cada diez segundos, las 24 horas del día durante 5 meses, podrían causar daños en las especies marinas y alterar sus rutinas alimentarias y reproductivas.
El grupo anglo-holandés, en cambio, afirmaba que había tomado «especial cuidado en evitar o minimizar» el impacto de sus operaciones en la vida salvaje.
Fuente: El Nacional