La motocicleta es uno de los símbolos más tendientes a la libertad, rebeldía, velocidad y sexualidad de la actualidad, a grado tal de convertirse en fetichismo, por lo que tener relaciones en la moto es una más de las fantasías sexuales más comunes, aunque muy arriesgada si se intenta en movimiento.
Esta fantasía sexual no exclusiva de los bikers ni amantes de la velocidad, además de que no está de sobra practicar un poco con algunos juegos en la intimidad, antes de llevarla a cabo hasta en diversos tipos de motos, tal como se muestra en el siguiente video de Vshleme:
No cabe duda que, al igual que en toda fantasía sexual, la imaginación y sensualidad son piezas claves, así como el gusto por darle un giro a la vida sexual en pareja y para vivir nuevas aventuras; por lo cual, te presentamos algunas posturas que podrían ser ideales para este juego erótico:
1. Postura de la Amazona. Sentado en la moto de manera normal, el hombre recibe a su pareja, quien se sienta de costado sobre uno de los muslos de su compañero, y guía al pene hasta la abertura de la vagina. Una vez hecho, ella puede contraer los músculos vaginales para controlar la penetración y el ritmo.
2. Unión de la abeja. La mujer se sienta sobre el pene de su compañero y quedan frente a frente, de tal forma que ella puede ir y venir verticalmente casi sobre el tanque de la moto o el mismo asiento, apoyándose en manos y piernas. El hombre acompaña el movimiento levantándola con los muslos.
3. Postura de la balanza. La mujer le da la espalda a su pareja antes de sentarse sobre sus muslos. Una vez introducido el pene, ella puede inclinarse hacia adelante para alcanzar una posición de equilibrio y balancearse a lo largo del pene, a la vez que controla la moto. Para una mayor estabilidad, la mujer se apoyará en las rodillas del hombre, quien le puede acariciar la espalda y senos.
4. Postura del tallo. La mujer recostada en la parte delantera de la moto hasta el manubrio, levanta las piernas colocando una sobre el hombro de su compañero, y la otra sobre su antebrazo opuesto, mientras que él controla la penetración. Para obtener aún más placer, la mujer mantendrá sus muslos lo más apretados que pueda y él alternará penetraciones vigorosas y profundas con otras más suaves y superficiales.
5. Postura Indra. Al igual que la anterior, recostada bocarriba, ella coloca sus pies contra el torso de su compañero. El hombre se inclina hacia adelante para comprimir los muslos de la mujer contra su pecho, usando como impulso los pedales de la moto o bien puede subir una rodilla al asiento para mayor apoyo.
Si bien no se aconseja mucho combinar el arte amatorio con la velocidad, no por la enorme carga de adrenalina o excitación, sino por la alta probabilidad de un accidente, es importante que quien lo intente tenga en consideración la seguridad de ambas personas y tomar tooodas las medidas de seguridad, no sólo casco, guantes y rodilleras. /Jm
Fuente: S180