Practicar sexo en el baño es una de las fantasías más recurrentes. Pero, ¿sabes cuál es la mejor manera de hacerlo? Sin duda, lo más cómodo es practicar sexo en la ducha, mejor que en una bañera. Con el agua cayendo sobre los dos y una pared cerca donde apoyarse las posibilidades son infinitas. Esta Semana Santa si no puedes ir a la playa, no renuncies al sexo en el agua y toma nota de los consejos que te damos para que tu experiencia en la ducha sea orgásmica.
Practica sexo seguro
Practicar sexo seguro no solo se limita al uso de anticonceptivos, cuando hablamos de sexo en la ducha, también podemos correr un riesgo físico si no ponemos mucho cuidado. Puedes jugar con el agua en la ducha, pero no con geles, aceites de masajes y demás productos cremosos, podríais resbalar y transformar una noche de pasión en una noche en urgencias. Tampoco debes apoyarte en la mampara, las cortinas o el mango de la ducha, podrías tener un accidente si se rompen.
La mejor manera de evitar los descuidos con el suelo de la ducha es poner una alfombrilla con ventosas para evitar cualquier accidente.
Respetando estas normas básicas de seguridad en la ducha, debes tener en cuenta las normas de seguridad en el sexo. El agua y el látex no se llevan nada bien. El preservativo masculino podría romperse o salirse en un descuido sin que lo notéis, así que lo mejor es que uses otro método anticonceptivo, si es con tu pareja habitual. Cuando sea un encuentro sexual casual, lo mejor será que evites el contacto con el agua, así que prueba practicando sexo fuera de la ducha o disfrutar de un baile sensual bajo el agua para poneros a tono. ¡Seguro que lo disfrutas mucho!
Las mejores posturas bajo el agua
Por supuesto, la mejor manera de practicar sexo en una ducha es con posturas de pie. La postura estrella es «la regadera», ¿no sabes cómo es? Aprovecha la fuerza de tu chico y la tuya para llevar a cabo esta excitante postura. Apoya tu espalda con fuerza contra la pared, tu chico debe cogerte por el trasero y elevarte para que puedas rodearle con tus piernas y acercar vuestros genitales. ¡Imagínate practicar esta postura bajo el agua del mango de la ducha!
También podéis intentar introducir una banqueta en el plato de ducha, para que tu chico se pueda sentar mientras te mueves encima de él como más te guste. Para ahorrar agua, podéis cortar el chorro de la ducha una vez que vuestra piel esté húmeda. ¡Las caricias serán mucho más intensas!
Si os gusta la típica imagen de una pareja en una bañera llena de agua, también podéis probar a pasar un buen rato de caricias bajo el agua. Siéntate delante de tu pareja, dándole la espalda y guía su mano a tus zonas favoritas, ¡le encantará que tomes el control!
Juega en la ducha
Como cuando los niños se quieren llevar sus juguetes y muñecos favoritos a la bañera, tú puedes tener los tuyos. Apuesta por juguetes sexuales que funcionen en contacto con el agua para divertirte bajo la ducha. Compra un gracioso patito vibrador, podrá pasar desapercibido en tu bañera y te proporcionará muchos momentos de placer.
También puedes apostar por la masturbación con los chorros de agua de la ducha. Regula la temperatura y acaricia tu clítoris dejando que el agua fluya por todas partes, seguro que descubres sensaciones nuevas que ni imaginabas…
Para una noche especial
Si eres una chica afortunada y puedes pasar una noche en un hotel con jacuzzi, disfruta de los chorros con tu pareja. Aprovecha para quitarte la ropa lentamente antes de meterte en el agua, ¡cuanto más lento vayas tú, más rápido lo querrá él! Con espacio suficiente, podrás probar la postura que más te guste en una bañera de chorros, sentada encima, de espaldas… ¡tú eliges!
Fuente: MujerElite