Tras cuatro horas de debate, el Senado de los Estados Unidos declaró constitucional el juicio político en contra de Donald Trump, con 56 votos a favor y 44 en contra.
Los republicanos que votaron a favor de la moción fueron Bill Cassidy, Susan Collins, Lisa Murkowski, Mitt Romney, Ben Sasse y Pat Toomey.
Mañana miércoles se pasará a discutir el fondo del asunto: las acusaciones de “incitación a la insurrección” contra el exmandatario por los hechos que llevaron al asalto contra el Capitolio el pasado 6 de enero.
Una votación final podría tener lugar a principios de la próxima semana.
Uno de los abogados que defiende al expresidente, David Schoen, dijo que este proceso va a “desgarrar” al país y que “pone en riesgo a la institución de la presidencia”.
Schoen indicó que este juicio va a dejar a Estados Unidos “mucho más dividido y que la posición del país en el mundo va a quedar afectada”.
“Esto crearía una nueva ‘excepción de enero’ en la Constitución, invitando a algún futuro presidente a dar su mejor intento para subvertir la voluntad del pueblo antes de dejar el cargo”, contraargumentó el congresista Jamie Raskin.