Cuando salgas a caminar, como manera de ejercitarte, considera al dar los pasos hacer cierta técnica con respecto a pies, brazos, hombros, cabeza, espalda, abdomen, pecho y rodillas.
Pies: Al dar el paso, apoya el talón en el suelo; después, ve apoyando la planta del pie hasta llegar a la punta, y empuja en los dedos del pie.
Brazos: Mantenlos en un ángulo de 90 grados, moviéndolos alternativamente hacia adelante y hacia atrás con cada paso. No los cruces sobre el pecho.
Hombros: Mantenlos relajados, hacia atrás, sin subirlos hacia la cabeza.
Cabeza: Imagina que hay una cuerda fijada en la coronilla y que tira de ella hacia arriba.
Espalda: Mantenla recta, como si acabaran de echarte un chorro de agua helada.
Abdomen: Hunde el ombligo hacia la columna vertebral, como si estuvieras subiéndole el cierre a esos pantalones de mezclilla que (antes) te apretaban.
Pecho: Los yoguis se refieren al frente del esternón como la “luz del corazón”. Sácala como si la proyectaras.
Rodillas: Nunca las endereces del todo. Mantenlas ligeramente dobladas y apuntando hacia adelante.