El presidente de Asociación Venezolana de la Industria Química y Petroquímica (Asoquim), Juan Pablo Olalquiaga, informó que el gobierno tiene una deuda con el sector por el orden de los $350 millones, de los cuales $250 corresponden al año 2013.
Durante una entrevista en El Noticiero Televen, Olalquiaga explicó que el sector químico requiere normalmente unos $1300 millones al año. En el 2014 «se hicieron importaciones por el orden de unos $400millones, lo cual te pone en menos de la mitad, pero se realizaron en el segundo semestre del año con lo cual la producción va a fluir por lo menos un par de meses más».
Señaló que el Sicad I el año pasado, le permitió al sector la importación de materias primas en algún grado. «Todavía se están realizando algunas importaciones con esas divisas que otorgaron a través del Sicad 24».
No obstante, recordó Olalquiaga, cuando llegó el mes de noviembre comenzó a paralizarse la aprobación de divisas por medio del Sicad, por lo que advirtió que la capacidad de producir va a durar poco en la medida que no se tomen las acciones necesarias para que la materia prima siga fluyendo.
A su juicio, el control de precios ha influido negativamente en los productos de cuidados del hogar por el bajo monto al que deben comercializarse, por lo que las empresas «ya no pueden seguir fabricándolos».
Por otro lado, indicó que la industria química y petroquímica se ve perjudicada por la indefinición cambiaria. «Se nos dijo que este sector por las implicaciones que tiene en el suministro de materias primas, que después de alimentos y medicamentos éramos el tercer sector de mayor importancia», sin embargo no han tenido acceso a más divisas.
A Olalquiaga le pareció inconveniente que se hayan anunciado unas reglas para el nuevo sistema cambiario en diciembre y todavía no exista fecha para su implementación.
«Una política económica sana debe ser previsible para que las empresas puedan hacer los planes sobre sus costos, manejar su política laboral, su política de distribución. Estamos en una parálisis producto de esa improvisación», subrayó.
VÍCTOR LA CRUZ
EL UNIVERSAL