Las hepatitis víricas constituyen un importante problema mundial de salud y exigen una respuesta urgente.
El Día Mundial contra la Hepatitis, el 28 de julio de 2017, ofrece la oportunidad de impulsar todas las iniciativas para aplicar la primera Estrategia mundial del sector de la salud contra las hepatitis víricas, 2016-2021, y ayudar a los Estados Miembros a conseguir el objetivo final – eliminar la hepatitis.
ELIMINAR LA HEPATITIS
Las actividades e iniciativas de sensibilización en torno al Día Mundial contra la Hepatitis tienen por objeto:
– Potenciar y aprovechar el compromiso político tras el refrendo oficial de la Estrategia mundial del sector de la salud contra las hepatitis víricas en la Asamblea Mundial de la Salud de 2016.
– Dar a conocer las respuestas nacionales a la hepatitis que se están empezando a utilizar en países con una carga elevada de esta enfermedad.
– Alentar la acción y la colaboración de personas, asociados y el público en general.
– Poner de relieve la necesidad de potenciar la respuesta mundial, según se señala en el Informe mundial de la OMS sobre las hepatitis correspondiente a 2017.
En apoyo de la campaña «Eliminar la hepatitis», la OMS publicará nueva información sobre las respuestas nacionales en los 28 países con mayor carga de la enfermedad. 11 países concentran casi el 50% de la carga mundial de hepatitis crónicas:
Brasil, China, Egipto, India, Indonesia, Mongolia, Myanmar, Nigeria, Pakistán, Uganda, Viet Nam.
Además, 17 países tienen una alta prevalencia de la enfermedad y, junto con los anteriores, soportan el 70% de la carga mundial:
Camboya, Camerún, Colombia, Etiopía, Filipinas, Georgia, Kirguistán, Marruecos, Nepal, Perú, Sierra Leona, Sudáfrica, Tailandia, Tanzanía, Ucrania, Uzbekistán, Zimbabwe.
MENSAJES CLAVE DEL DÍA MUNDIAL CONTRA LA HEPATITIS 2017
1. Las hepatitis víricas constituyen un importante problema mundial de salud y exigen una respuesta urgente.
A finales de 2015 había aproximadamente 325 millones de personas con hepatitis crónicas.
Se estima que en 2015 había en el ámbito mundial 257 millones de personas infectadas por el virus de la hepatitis B (VHB) y 71 millones de personas infectadas por el virus de la hepatitis C (VHC).
2. Muy pocas de las personas infectadas tuvieron acceso a pruebas y tratamiento, especialmente en los países de ingresos bajos y medianos.
A finales de 2015, tan solo el 9% de las personas infectadas por el VHB y el 20% de las infectadas por el VHC se habían sometido a pruebas y contaban con un diagnóstico. En 2015, de las personas diagnosticadas con infección por el VHB, el 8% (1,7 millones de personas) recibían tratamiento, mientras que el 7% de los diagnosticados con infección por el VHC (1,1 millones de personas) habían iniciado tratamiento.
Las metas de alcance mundial para 2030 son las siguientes: el 90% de las personas con infecciones por el VHB y el VHC se habrán sometido a pruebas de detección y el 80% de los pacientes con las condiciones adecuadas habrán recibido tratamiento.
3. Las hepatitis víricas provocaron 1,34 millones de muertes en 2015 – una cifra comparable a la de las muertes por tuberculosis y superior a la de las muertes por VIH. Las muertes por hepatitis van en aumento.
4. Siguen registrándose nuevas infecciones de hepatitis, sobre todo de hepatitis C.
El número de menores de cinco años con infección crónica por el VHB se redujo al 1,3% en 2015 (frente al 4,7% anterior a la introducción de las vacunas).
La vacuna contra la hepatitis B previene aproximadamente 4,5 millones de infecciones al año en niños.
Sin embargo, en 2015 hubo 1,75 millones de nuevas infecciones por el VHC, debido principalmente al consumo de drogas inyectables y a la administración de inyecciones poco seguras en los entornos sanitarios de determinados países.
5. Conseguir eliminar las hepatitis en 2030 no es un objetivo excesivamente ambicioso; los informes de 28 países con una elevada carga de la enfermedad alientan el optimismo.
En el Día Mundial contra la Hepatitis 2017, la OMS publicará los perfiles de 28 países en los que se muestra que, a pesar de las numerosas dificultades, el empeño mundial por eliminar las hepatitis va ganando terreno. No obstante, persisten importantes obstáculos.
Por Confirmado: MariGonz