A muchas mujeres les preocupa tener problemas durante el embarazo. El embarazo ectópico es un problema poco frecuente, pero grave durante el embarazo. Se produce cuando un óvulo fertilizado se implanta fuera del útero. Los síntomas incluyen dolor abdominal y en el hombro, calambres, sangrado vaginal, náuseas y mareos. El embarazo ectópico es un problema muy grave, y es por eso que a continuación veremos cómo se diagnostica este problema que nos puede afectar durante el embarazo y que puede ser muy perjudicial para nuestra salud.
Puesto que este problema puede ser difícil de diagnosticar, la mujer debe someterse a varias pruebas para poder determinarlo, entre las que se encuentran un examen pélvico y una serie de análisis de sangre para medir los niveles de una hormona del embarazo denominada gonadotropina coriónica humana. Las concentraciones de esta hormona suelen ser bajas en un embarazo ectópico. También hay que someterse a exámenes por ultrasonido vaginales o abdominales para localizar el embarazo. Suele realizarse un ultrasonido vaginal ya que puede mostrar el estado del bebé antes que un ultrasonido abdominal.
Si estas pruebas no confirman un embarazo ectópico, es posible que el médico deba vaciar el útero – un procedimiento denominado dilatación y curetaje – para determinar si la mujer ha tenido un aborto espontáneo o un embarazo ectópico.Algunos de los síntomas de este problema que puede afectar a algunas mujeres son los dolores con cólicos y con sensibilidad extrema, sobre todo en la parte inferior del abdomen. El dolor podría agravarse al evacuar o toser. También se pueden presentar pérdidas vaginales de color pardo o ligeras hemorragias varios días o semanas antes que los dolores, aunque estas pérdidas no se darán si no hay rotura de la trompa. Si la trompa de Falopio se rompe, a parte del dolor habría una hemorragia intensa.
Hay que tener en cuenta que un alto porcentaje de mujeres con embarazo ectópico sufrennáuseas y mareos, y algunas mujeres sufren desvanecimientos o sensación de debilidad. Si la trompa se rompe, también son habituales el pulso rápido y débil y la piel extremadamente fría y húmeda. El dolor de lumbago, en los hombros y presión en el recto son también síntomas habituales. Es muy importante detectarlo a tiempo, ya que tanto nuestra salud como la de nuestro bebé están en juego.
Fuente: Nosotras