Las autoridades rusas bloquearon este jueves el acceso a la página web neonazi estadounidense The Daily Stormer, que adoptó un dominio ruso para esquivar el veto en Estados Unidos después de la violencia en Charlottesville. La agencia rusa de vigilancia de medios Roskomnadzor ordenó al sitio de registro de dominio ruso, Ru-Center, que cerrara la web unas horas después de su puesta en línea, debido a que «promueve la ideología neonazi y alimenta el racismo, el nacionalismo y otros tipos de odio», según un comunicado.
Acusado de haber ayudado a los grupúsculos supremacistas blancos a reunirse para protestar contra el desmantelamiento de una estatua de un general sudista en Charlottesville, donde uno de sus simpatizantes mató a una mujer de 32 años, The Daily Stormer fue desactivado por las empresas estadounidenses registradoras de dominios GoDaddy y Google Domains.
El miércoles por la noche, el sitio proclamó en su página de VK, una red social rusa muy popular, estar «de vuelta» en el internet clásico proporcionando un enlace que utilizaba la extensión rusa «.ru».
«La historia de una verdadera amistad: Trump llamó a Putin para que nos proporcione un nuevo dominio», pudo leer la AFP el miércoles por la noche en esta web.
Para bloquearlo, el regulador ruso se dirigió directamente a la empresa de registro de dominios Ru-Center, un procedimiento inusual. La página del sitio en la red social VK es sin embargo accesible.
Los grupos supremacistas blancos, algunos de los cuales participaron en los enfrentamientos en Charlottesville, encuentran a menudo un espacio de expresión en VK, «una vasta plataforma donde pueden esconderse y donde el control es bajo», señala a la AFP Alexander Verkhovski, el director del centro Sova, que estudia la xenofobia y el nacionalismo en Rusia.
Además de The Daily Stormer, grupos supremacistas de Estados Unidos como el National Socialist Movement o la League of the South cuentan con una página en VK, un fenómeno que se explica por «el aumento de la censura en Facebook», según este especialista.
La red social Facebook y otras grandes empresas de Silicon Valley tomaron medidas para bloquear o suprimir cuentas y contenidos relacionados con la extrema derecha estas últimas semanas, principalmente tras los enfrentamientos en Charlottesville, a riesgo de recibir acusaciones de censura.
AFP