La revista pinta un panorama negro para el futuro de la ciudad más latina de los EEUU: el aumento del nivel del mar generará su fin. “Está condenada”, sentencian en la nota.
“Adiós Miami”, se titula la nota que forma Jeff Goodell en la nota que se puede leer completa en Internet y que anticipa la edición impresa que circulará desde julio. “Hacia fin de siglo, el crecimiento del nivel del mar transformará a la tierra de la fantasía en una Atlántida Americana. Pero antes de que quede completamente bajo el agua, comenzará el caos”, avisa.
Goodell imagina un huracán letal, llamado Milo, que asolará la ciudad hacia el año 2030 y dejará “una capa de arena” y “un manatí muerto” en el lobby del emblemático hotel Fontainebleu, el mismo “donde Elvis ha nadado alguna vez”.
La descripción se explaya en escenas apocalípticas que incluyen falta de agua potable y plantas nucleares destrozadas, para dar cuenta luego de los pronósticos científicos que motivan la nota.
La imagen que utiliza Rolling Stone corresponde al paso del huracán Vilma en 2005
Godell estima que pasarán 100 años -que si se lo ponen a pensar, no es mucho- antes de la desaparición total, pero también augura muchos problemas insalvables antes de que eso pase. No será de un día para otro.
“Las aguas cada vez más crecientes destruirán lentamente a Miami, a medida que se filtren por las instalaciones eléctricas, los cimientos de edificios y suministros de agua potable, y al aumentar de forma dramática el destructivo poder de los huracanes”, describe.
Como es lógico, la oscura presunción desató todo tipo de reacciones, algunas de las cuales recoge El Nuevo Herald. Si bien hay críticas, otros coinciden con la visión de Harold Wanless, profesor de Geología de la UM (Universidad de Miami): “Como sabemos, Miami está condenada”.
El mismo Wanless advierte que la destrucción de Groenlandia y la capa de hielo del océano Ártico “lleva a un acelerado aumento del nivel del mar. Decimos que es un problema para nuestros nietos, cuando en realidad es un problema para nosotros”.
ENH se hace eco de una presentación realizada ante una corte federal norteamericana por un grupo defensor de la limpieza del agua denominado Biscayne Nay Waterkeeper. Allí se pronostica que en un lapso de 50 años el océano estará dos pies por encima de nivel actual. Sería letal, sostienen.
Sin embargo, los políticos locales parecen resistirse a las visiones apocalípticas. Michael Góngora, candidato a la alcaldía, criticó el reportaje por su tono “muy pesimista”, con el que no está de acuerdo.
“Esperaba hallar una mirada más positiva que hablara de todo lo que está haciendo Miami Beach para evitar una catástrofe, pero no se habla más que de desastres que se avecinan”, sostuvo Góngora. Sin embargo, por el momento las mejores esperanzas no parecen sostenerse con razones científicas.
Fuente: Agencias