Roger Federer, que el pasado jueves anunció su retirada a los 41 años tras 24 en el circuito profesional, ha revelado este miércoles que jugará su último partido como profesional el próximo viernes en la Laver Cup, un torneo ATP que se celebra en el O2 de Londres del 23 al 25 de septiembre.
“Sé mis limitaciones, y eso es por lo que he preguntado si puedo jugar solo un [partido de] dobles [en el torneo] el viernes por la noche”, ha anunciado el jugador en una rueda de prensa en la capital inglesa.
Cómo quiere ser recordado. «Siempre me fijé en la regularidad de Schumacher o Woods y estoy contento de poder ser comparado a ellos».
Sobre su estatus como el mejor de todos los tiempos. «Estoy orgulloso de lo que he ganado. Después de ganar mi decimoquinto Wimbledon todo lo demás ha sido un bonus. Que estuviera Sampras en la grada fue muy especial. Estoy contento de haber sido capaz de ganar 20 ‘Grand Slam’ y más de 100 títulos».
Una cosa que desearía haber cambiado en su carrera. «Quizás haber sido más profesional al principio de mi carrera».
En total, el suizo ganó 1.526 partidos y levantó 103 trofeos, pero, sobre todo, hizo algo que va mucho más allá de las cifras: logró un estilo único, elegantísimo y probablemente inigualable.
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