El dirigente regional de Voluntad Popular denunció que el conocido sacerdote falleció en el año 2009 y tres años más tarde, en el 2011, se atrevieron a vender su casa. Le falsificaron su firma y también utilizaron una huella digital que no era la de Monseñor Godoy. Gutiérrez dio a conocer los documentos públicos que demuestran el hecho irregular que hoy publicamos.
«Reviven» a Monseñor Eberto José Godoy Briceño para vender su casa, es lo primero que repudia el dirigente regional del partido Voluntad Popular, ingeniero Miguel Gutiérrez, al denunciar que dentro de los organismos públicos de Registro y Notaría existe una «enorme corrupción».
«Cómo es posible que Monseñor murió el 29 de septiembre del 2009, y tres años más tarde, en el 2011, se atrevieron a vender su hogar. Tengo en mis manos los documentos en los que aparecen las indiscutiblemente falsas huellas y firma del Padre. ¡Qué es eso! entonces ahora hasta los fallecidos venden», declaró Gutiérrez.
Mostró los documentos en los que aparece la venta procesada el 11 de noviembre del 2011 por Freddy Montilla, Notario Público Trigésimo Segundo del municipio Libertador-Caracas, respaldado en que Monseñor estaba residenciado en la capital del país. «Hicieron esto cuando es notable para el pueblo trujillano que Godoy tuvo una trayectoria sacerdotal de más de 47 años en el estado, no vivía en Caracas», mencionó el dirigente.
Todas las pruebas
Gutiérrez presentó el acta de defunción de Monseñor, en la que se especifica que falleció a los 80 años por una insuficiencia respiratoria aguda. Asimismo, en el documento de compra-venta se precisa que el hogar del hoy difunto Monseñor está ubicado al sur de la ciudad, parroquia Juan Ignacio Montilla, sector Las Acacias, casa número 32. Y tiene una extensión de 500 metros cuadrados.
«El documento de venta que emitió esa Notaría, en el 2012 fue avalado por el Registrador Inmobiliario de Valera, Motatán y San Rafael de Carvajal, Zenic Leandro Rangel, con testigos como Pedro José Rangel Olmos, quien es la misma persona que elaboró el documento en el Registro. Esto es una irregularidad», agregó Gutiérrez.
Sobre quién es ahora el supuesto dueño de la casa del Monseñor, los oficios indican que es Leopoldo Meza, quien según el documento adquiere la propiedad del inmueble por bolívares 120.000.
Trayectoria
Gutiérrez señaló que el caso se vuelve más grave porque se trata de una persona que fue tan apreciada en el estado Trujillo «y tras su desaparición física deja la marca de una gran trayectoria». En una revisión de los archivos se registró que Monseñor Eberto Godoy se estableció en Valera al ser nombrado en 1962, Vicario de la iglesia San Juan Bautista. Además, fue sacerdote de las iglesias ubicadas en Trujillo capital, «La Catedral» y «Santa Rosa de Lima».
Monseñor también fue el primer director del Semanario «Avance», dejó importantes apoyos en Hogares Crea, Rotary Club y Sociedad Anticancerosa. Fundó la organización de la Acción Católica Juvenil, dio clases de inglés, latín y filosofía en el liceo «Cristóbal Mendoza» y en el liceo «Rafael Rangel» de Valera, de donde salió jubilado.
En cuanto a su formación, el nacido en el municipio Escuque el 15 de agosto de 1929, estudió Educación Superior en Filosofía y Teología en el Seminario Inter-Diocesano de Santa Rosa de Lima de Caracas. Se ordenó como sacerdote en Mérida el 15 de agosto de 1953; y en Roma estudió dos años, desde 1962 a 1964, un postgrado de «Derecho Canónico» en la Universidad Lateranense.
Monseñor no declarado
«Cualquier trujillano tiene acceso a estos documentos y los pueden buscar en el Registro bajo el número 2012.3953. Y el caso se complica al verificar que Monseñor Godoy al fallecer no fue declarado ante el Seniat. Es decir, no existe declaración ante al fisco. Tenían que declararlo y eso se violentó», añadió el ingeniero Gutiérrez y dijo que también inició una investigación para descubrir si en el caso están implicados funcionarios de la gestión pasada en la Alcaldía de Valera.
Diario Los Andes
