La oncóloga Nise Yamaguchi confirmó este martes que actuó con otros médicos en un “consejo” que asesoraba al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en el combate a la pandemia y que ese grupo cree en remedios de dudosa eficacia contra la covid.
“Es un grupo de médicos”, “sin vínculo oficial”, pero que tenía reuniones periódicas con el propio Bolsonaro y el Ministerio de Salud sobre la covid-19, declaró Yamaguchi ante una comisión del Senado que investiga posibles omisiones del Gobierno frente a una pandemia que ya mató a más de 462.000 brasileños.
Aún así, dijo que era una “colaboración eventual”, que no operaba como un “gabinete paralelo” y sostuvo que sus recomendaciones ayudaron “a salvar vidas” y “reducir hospitalizaciones” en Brasil.
amaguchi reconoció que esos “voluntarios” abrazan las teorías del llamado “tratamiento precoz”, que incluye la cloroquina y otros medicamentos cuya eficacia contra el coronavirus no está comprobada y que aún así fueron incluidos entre los recetados en la sanidad pública brasileña.
Sin presentar datos concretos, Yamaguchi insistió en defender esos remedios sobre la base de “experiencias personales” de ella misma y esos médicos, que habrían logrado reducir las tasas de mortalidad entre pacientes que trataron.
El uso de esos medicamentos, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y entidades científicas globales ya han vetado contra la covid-19, es uno de los puntos centrales de la investigación de la comisión, que intenta establecer si el Gobierno es responsable del descontrol de la pandemia en el país y el elevado número de muertos.
Yamaguchi también cayó en contradicciones respecto a una reunión con miembros del Gobierno en la que, según el director de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), Antonio Barra Torres, se habría discutido alterar, en forma irregular, el prospecto de la cloroquina para recomendarla contra la covid-19.
La comisión fue creada a instancias de la oposición, que tiene siete de sus once miembros, y en poco más de un mes de investigación ya ha recogido serios indicios de fallos y omisiones del Gobierno de Bolsonaro, líder de una negacionista ultraderecha que aún minimiza el impacto de la pandemia.
Uno de los asuntos más serios apunta a supuestos graves atrasos del Gobierno en la negociación de vacunas, que le fueron ofrecidas desde mediados de 2020 pero sólo comenzó a comprar a inicios de este año, cuando la oferta y la capacidad de entrega de las farmacéuticas ya era reducida por la elevada demanda global.
EFE