La entidad financiera estadounidense Goldman Sachs anunció este jueves 14 de abril que en el primer trimestre del año obtuvo un beneficio de 3.939 millones de dólares, un 42 % menos que en el trimestre equivalente de 2021, afectada ahora por la guerra en Ucrania.
La empresa, con sede en Nueva York, reportó una facturación acumulada entre enero y marzo de 12.933 millones, un 23 % inferior al mismo tramo del ejercicio anterior, según indicó en un comunicado.
«Ha sido un trimestre turbulento dominado por la devastadora invasión de Ucrania», destacó el principal ejecutivo, David Solomon, quien dijo que se priorizó la «intermediación del riesgo» mientras la emisión de valores «casi se paralizaba».
Goldman Sachs duplicó sus beneficios el año pasado, en buena parte debido a la liberación del dinero que había aportado a sus reservas contra pérdidas crediticias ligadas a la pandemia de covid-19, como otras firmas de la gran banca estadounidense.
No obstante, en este primer trimestre la compañía volvió a incrementar esas reservas en 561 millones de dólares para hacer frente a problemas «macroeconómicos y geopolíticos», entre otras cosas.
La entidad especializada en el «trading» (corretaje) y en la asesoría de fusiones y adquisiciones corporativas ha disfrutado de los dos años de bonanza en Wall Street, pero esa tendencia se ha frenado a raíz de la guerra en Ucrania, que ha sacudido a las empresas y los mercados.
Por divisiones, la banca de inversión de Goldman Sachs redujo sus ingresos un 36 % por la menor actividad en los mercados de capital, mientras que la correduría de renta fija recaudó un 21 % más gracias a las operaciones con materias primas y divisas.
La división de gestión de activos facturó un 88 % menos interanual, y dentro de ella el área de inversiones de valores incluso registró una pérdida.
En todo caso, los resultados superaron las expectativas de los inversores y las acciones de la compañía subían un 3 % en los primeros compases de la bolsa.
Fuente: Banca y Negocios