La diputada de la Coalición Cívica opositora Elisa Carrió denunció hoy que la presidenta argentina «Cristina (Fernández de Kirchner) es la verdadera dueña de todo lo que se está llevando Lázaro» Báez, un empresario denunciado por supuesto lavado de dinero.
Carrió hizo estas declaraciones tras denunciar ante la Justicia que Báez habría vaciado supuestas bóvedas secretas que poseía en una de sus residencias después de difundirse una investigación periodística que lo señalaba por la supuesta transferencia ilegal de fondos al exterior, informó DPA.
La diputada presentó fotografías de cómo se desmontaron las supuestas bóvedas, hecho que Báez desmintió al invitar a la prensa a su lujosa residencia en la austral ciudad de Río Gallegos para que verificaran que no existían tales recintos.
«En las imágenes se puede ver cómo de allí se llevaron dinero, papeles y muchas armas», sostuvo Carrió.
El juez federal Sebastián Casanello rechazó esta nueva denuncia de Carrió, tras lo cual la diputada y ex candidata presidencial lo consideró «un encubridor de Báez».
Carrió acusó al magistrado de haber tenido la información este martes por la tarde y habérsela pasado a Báez. «Esa es la justicia cristinista; Casanello tiene dos secretarios del juez son de (la agrupación juvenil kirchnerista) La Cámpora: ésa es la Justicia que quiere Cristina», señaló a radio Mitre de Buenos Aires.
La legisladora solicitó en tanto que se proteja la vida de quien denunció la existencia de la bóveda de Báez y tomó las fotografías, un ex empleado de la compañía Austral Construcciones, que pertenece al empresario de estrechos vínculos con Fernández de Kirchner y años atrás con el fallecido ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007).
Carrió advirtió que presentaría sus denuncias contra Fernández de Kirchner ante la Justicia internacional, y que además viajará «a Nueva York para impedir la compra de (parte de las acciones de la filial argentina de) Petrobras por parte de Cristóbal López», otro empresario vinculado al kirchnerismo.
La diputada contrapuso el nuevo lema del kirchnerismo acerca de «la década ganada», como denomina el oficialismo a los diez años que lleva en el poder, a «una década robada por una asociación ilícita».
Báez, en tanto, abrió las puertas de su lujosa chacra en Río Gallegos, capital de la patagónica provincia de Santa Cruz donde construyó su carrera política Néstor Kirchner.
«Bajen a la bóveda, quiero que vean y juzguen ustedes», pidió el empresario a la prensa. El lugar es una cava de vinos y cuenta con heladeras. «No, no tengo bóveda, ni caja de seguridad», aseguró.
Báez sostuvo que «esas fotos no pertenecen a este lugar» y negó todas las acusaciones en su contra por supuesto lavado de dinero y transferencia ilegal de fondos al exterior.
El empresario desmintió por otra parte haber tenido «una relación empresarial con Néstor Kirchner, lo único que hice para él fueron los departamentos de la calle Mitre» de Río Gallegos, precisó.
Fuente: EU