Tras varios días de conflicto, los estudiantes de la Universidad Santa María se reunieron con las autoridades, a través de la instalación de un Consejo Universitario, celebrado en las instalaciones de la casa de estudios este miércoles al mediodía. Durante el encuentro, acordaron la contratación de dos custodios que se encargarán de requisar a los alumnos que se monten en las unidades de transporte público que hacen traslados desde La California hasta la institución.
Asimismo, los representantes de la línea de transporte Cultura, que presta servicio en la sede, ubicada en Filas de Mariche, se comprometieron a grabar a los pasajeros. También la directiva de la centro de estudios superiores, prometió reforzar controles con el uso de los carnets. «Aquellos alumnos que no posean el documento de identidad, no podrán ingresar a las instalaciones, salvo los pacientes que acuden a odontología», explicó Carlos Guzmán, consejero universitario.
Los estudiantes solicitarán una audiencia con el alcalde del municipio Sucre, Carlos Ocariz, con el fin de pedir que funcionarios de la Polisucre custodien las paradas de autobuses y las adyacencias de la universidad. Las clases en la institución se mantendrán suspendidas hasta el lunes, mientras acuerdan los mecanismos de seguridad.
EL UNIVERSAL