La distorsión de precios apaga líneas de producción. La paralización de la manufactura de detergente en polvo en Colgate Palmolive obedece a la imposibilidad de pagar al proveedor los empaques que en menos de un año aumentaron su precio en 300%. Pero no se trata de especulación. Los aditivos químicos que se emplean para su elaboración son importados y muchas empresas han tenido que optar por el dólar libre para contar el insumo.
Julio Polanco, secretario general de la industria del plástico, detalló que el costo de la materia prima que suministra Pequiven, como polietileno y polipropileno, fue ajustado por última vez a mediados de 2014. Desde ese momento se paga a un millón 50 mil la tonelada. El problema del sector está determinado por componentes adquiridos en el exterior como los pigmentos colorantes.
El despacho desde la planta El Tablazo de la filial de Pdvsa también ha estado comprometido. La empresa trabaja a 40% de su capacidad por la falta de un gas especial proveniente desde Colombia y cuyo envío se suspendió al no renovarse en convenio binacional.
Bobinas agotadas
Con el segundo turno de trabajo de este martes se agotaron las bobinas de empaques film en Colgate Palmolive. Solo funcionaron dos de las seis líneas para manufacturar a máxima capacidad de 48 bolsas de 1.2 kilos por minuto de detergente en polvo. Los 120 trabajadores fueron reubicados en la planta de jabones. El lunes fueron informados de esta situación a través de una circular interna emitida por el director de manufactura de la firma en Venezuela, José Manuel Seijo, donde quedó claro que con el precio regulado del producto están produciendo a pérdida.
Imagen cortesía El Carabobeño
Dayrí Blanco
El Carabobeño