El gobierno nacional quiere aplicar la Ley de Precios Justos en el sector educativo y esto puede verificarse en la requisitoria número 114 publicada en la Gaceta Oficial 40.542 del pasado lunes 14 de julio.
Así lo manifestó la presidenta de la Cámara Venezolana de Educación Privada, María Teresa Hernández de Curiel, quien además calificó la resolución del ministerio de Educación como una oferta engañosa.
«Es una oferta engañosa porque te dicen que como padre tienes todas las oportunidades pero al mismo tiempo desmejoran la calidad educativa de los niños”, sentenció.
Destacó la importancia que se concreten las asambleas establecidas en la providencia con el 75% de presencia o el 50% más uno de los padres y representantes para determinar el porcentaje de incremento para el proyecto educativo.
«En el artículo 8, parágrafo primero, dice que si no se lograra el quórum es el Ministerio de Educación quien estipulará el porcentaje; tenemos que leer entre líneas ya está bueno de hacer el papel de bobos, nos están diciendo que tenemos toda la posibilidad de determinar un porcentaje, pero al final es mentira”, criticó.
Cabe destacar que la resolución señala que para el análisis de la estructura de costos, la Asamblea Escolar tomará en cuenta los siguientes conceptos contables: materiales y suministros de oficina, limpieza y educación; mano de obra directa, sueldos y salarios de los docentes fijos y contratados, así como del personal obrero; servicios básicos, alquileres inmobiliarios, entre otros.
En este sentido, Hernández de Curiel observa como grave que en la normativa se exige presentar a los padres una estructura de gastos y costos basada en el currículo vigente, el cual no reconoce música, inglés, informática ni religión como horas académicas y lo coloca como gastos con un tope del 12,5%.
La presidenta de Cavep indicó en el circuito radial Unión Radio, que seguirán estudiando a fondo la resolución para seguir dando a conocer sus alcances los cuales deben verse con muchas reservas.
Finalmente la presidenta de Fenasopadres, Nancy Hernández de Martín, cuestionó que el gobierno nacional conciba la educación «como si estuviéramos trabajando con cajas de cartón para producir más materiales, cuando la realidad es que se trabaja con seres humanos y el servicio que se presta tiene unos costos intangibles que tienen que ver con la formación del niño, con la dedicación del maestro, con el propio perfil del proyecto educativo”.
EL IMPULSO
