¿Conoces a alguien que permanentemente se la pasa hablando de sí mismo o que siempre busca realzar sus virtudes o cualidades?. Si es así, es probable que estés ante una personalidad narcisista, pero, ¿qué es ser narcisista?
El narcisismo es una estructura psíquica de la personalidad, la cual funciona como un elemento mediador entre nosotros y los demás, es decir, una persona narcisista siempre está buscando que otro sea el que le dé seguridad. Tiene que ver con el mito de Narciso, aquel que era tan hermoso que buscaba en el agua el reflejo de esa imagen que le asegurara y le confirmara cada día su belleza.
Un narcisista privilegia su persona sobre los demás y dirige toda su energía afectuosa y libidinal hacia sí mismo. Por lo tanto, puede dañar, transgredir o pasar sobre los derechos de los demás, ya que considera al otro como espejo para reflejarse y obtener la imagen que desea, tal como Narciso lo hacía con el agua.
¡Todos tenemos algo de narcisistas!
Yolanda Bernal Álvarez, especialista de la Facultad de Sicología de la UNAM, explicó que todos de alguna manera tenemos una parte narcisista. “Es natural cuidarse, protegerse o quererse, incluso por cuestiones de sobrevivencia, el problema surge cuando se rompe ese equilibrio y se privilegia la afectividad hacia sí mismo más que hacia los demás”.
Existen diferentes personalidades narcisistas, el que busca lo que no es, el que desea ser lo que fue y ya no lo es más, y el que busca lo que quisiera ser. La universitaria señaló que éstas se relacionan y el común denominador es el sobre-investimiento libidinal sobre sí mismo. También se habla de un narcisismo retraído que va sobre sí mismo y uno expansivo, que consiste en “pegarse a otro” para buscar en ese otro lo que quiere para sí.
El narcisismo es una estructura síquica que se instaura en los primeros meses de vida del sujeto, en esas primeras experiencias con el otro, que en general suelen darse con el primer cuidador que es la madre.
Fuente: http://bienestar.salud180.com
