Lo mejor es comer porciones pequeñas varias veces al día, para asegurarles al cuerpo y su metabolismo que todo está bajo control y no está muriendo de hambre. Además, hay que tomar decisiones inteligentes y eso tiene que ver con hacer ejercicio no más de 4 veces a la semana, porque tu cuerpo necesita algunos períodos de descanso.
También es necesario beber al menos dos litros de agua al día (además de los demás líquidos que se ingieren, tales como jugos de fruta e infusiones) para desintoxicar tu sistema de forma natural y sin costo alguno para ti, ni en términos de dinero ni en términos de salud. También ayuda con la elasticidad de la piel y fortalece las uñas y el cabello. Si haces ejercicios físicos, deberías beber aproximadamente un litro una media hora antes de ejecutarlos y luego beber un litro justo después: eso te ayudará a mantener altos tus niveles de energía y de motivación.
Sin embargo, se puede correr todos los días sin ningún problema porque es divertido y no causa daños a tu cuerpo. Notarás que esta actividad de una hora se siente bien; sin embargo, cuando finalices la sesión de ejercicio, puede que te sientas bastante cansada porque has trabajado mucho los músculos.
Para resumir: haz ejercicio cada dos días y come sano pero lo suficiente para que no tengas hambre todo el tiempo. De esta forma, conseguirás correr para perder peso, y además cuidar de tu salud.
Fuente: vivirsalud.imujer.com
