Ya se nos olvidó Las Tejerías. Una cosa da paso a la otra. Las lluvias no dan tregua y este gobierno indolente, poco preocupado por la gente, en vez de declarar la emergencia permanente lo que hace es viajar a Egipto y París para asistir a sendas reuniones sobre el clima y la paz. Pero creíble o no lo que haya dicho en esos escenarios, no pierden oportunidad para criticar a todo aquel que no está de acuerdo con él.
Las últimas afectaciones ocurrieron en Falcón, Zulia, Nueva Esparta y Mérida. Miles de familias quedaron incomunicadas en los Andes venezolanos. Se espera que esta semana continúen las lluvias y la abundante nubosidad. Y solo es un alerta porque a la hora de la verdad aquí no hay planes para reacondicionar nada o reagrupar a familias en peligro porque viven en zonas difíciles o en las que en cualquier momento puede ocurrir una desgracia.
Nada. Solo decir que tengan cuidado, que viene mucha lluvia, que puede pasar algo, pero planes, ninguno. Promesas, eso sí, muchas, y echarle la culpa a cualquiera, desde los conquistadores hasta gobiernos anteriores, aunque ya sabemos que desde hace tiempo en este país gobiernan los mismos.
¿Y Las Tejerías? Nunca hubo cifras reales. Tampoco dejaron que se acercaran mucho los organismos internacionales ni los periodistas. Claro, molestan, como dijo Remigio Ceballos. Su actitud y forma de actuar lo que dejan en claro es que ni van a reconstruir nada ni van a reacomodar a nadie. Cada quien que arree por su cuenta.
Lo mismo ha pasado en El Castaño. El agua se lo llevó todo. Pero ahí está la gente de nuevo, arreglando, regresando a la zona donde han vivido toda la vida. Pasará lo mismo que en La Guaira, cuando ocurrió la tragedia de 1999, por un tiempo los medios de comunicación se ocuparon, el gobierno trató de hacer ver que arreglaba o reconstruía y después nada. Los ciudadanos de a pie, la gente común, tuvo que ingeniárselas para no quedarse sin techo, y confiar en que una tragedia igual no volvería a repetirse en mucho tiempo. ¿Será lo mismo acá?
Editorial de El Nacional
Vista aérea de la zona afectada en Las Tejerías, Aragua. Foto: Yuri CORTEZ /
AFP