La decisión de Donald Trump de catalogar a los carteles mexicanos como “grupos terroristas”, que llega tras la matanza de una familia de mormones estadounidenses en el norte de México, supone que Washington otorgaría más poderes a la lucha contra el tráfico de drogas y de personas.
El gobierno mexicano de Andrés Manuel López Obrador, que enfrenta un aumento en el número de muertes ligadas al narcotráfico, reaccionó defendiendo su soberanía ante posibles injerencias extranjeras.
Para Ricardo Ravelo, investigador en narcotráfico y autor de media docena de libros sobre el tema, el impacto de esta decisión podría ser positivo: “México tendría la ventaja de contar con por lo menos 50 organizaciones antiterroristas que operan en el mundo para apoyar y empezar a desmantelar a las organizaciones que se dedican al narcotráfico mexicano. No es posible llevar a cabo la política fallida que ha empleado el presidente Andrés Manuel López Obrador de no querer utilizar las fuerzas del Estado para combatir algo tan pernicioso como el crimen organizado”.
La idea pues sería “en principio desmantelar el patrimonio de los carteles, segundo desactivar todas las redes políticas y empresariales vinculadas a estas actividades, y de esa manera poder también frenar la violencia atroz que ese país padece desde por lo menos hace 20 años”, recalca el especialista.
“Tres maneras de atender el mercado de drogas”
Otros expertos juzgan en cambio que considerar como terroristas a los narcos tendría un impacto negativo.
“No lo veo muy positivo, porque los mercados no se combaten con balas. Hay tres maneras de atender el mercado de drogas. La más inteligente es la regulación de drogas. La segunda manera de hacerlo es administrar el problema como lo hacen Estados Unidos y algunos países europeos que no han regulado todavía: la policía se dedica a lo importante que es cuidar la seguridad de los ciudadanos, y no a este tema del mercado. Y la peor manera es lo que está haciendo México, Colombia o Brasil, o algunos otros países, que absurdamente intentan hacer una guerra frontal contra el mercado de droga metiendo incluso al ejército”, comenta Santiago Roel, especialista en seguridad y director de Semáforo Delictivo, que monitorea el crimen en México.
Resta por ver a qué se refiere en concreto Donald Trump con tratar a los narcotraficantes como terroristas, y si sus dichos son más que declaraciones en el inicio de la campaña electoral de 2020.