Si pensabas que los preliminares no eran necesarios, te equivocas, son la base para que toda relación sexual funcione. Sigue estos consejos que te daremos a continuación para que aprendas qué es lo que tienes que hacer y lo que no, antes del sexo:
No actúes como si le estuvieras haciendo un favor. Es muy fácil saber si él o tú lo están disfrutando o no, así que no busques mentirle. La idea del encuentro sexual es que ambos lo disfruten, si esto no está pasando es importante que digas: ¡Alto! Y que comiences a vivir la experiencia desde el principio.
Haz que dure lo suficiente. Si tu idea de preliminares consiste en un par de minutos de besos y 30 segundos de toqueteo, entonces estás muy equivocada. ¡Tómate tu tiempo! Es importante tentar al cuerpo, que exista la necesidad del uno hacia el otro. Nada apurado resulta bueno al final.
No pases de los preliminares porque pienses que no son necesarios. Aunque no lo creas sí son necesarios, y mucho. Estos ayudan a preparar tu cuerpo para lo que está por venir. Es necesario que tu piel, tus sentidos y tus órganos se acomoden a la situación que están viviendo. Mientras preparado este tu cuerpo, mayor placer sentirás.
No te quedes en silencio completamente. No queremos decir que no esté bien tener sexo parcialmente silencioso porque, a veces, también puede ser agradable. Pero no te acostumbres a vivir esta experiencia en “Mute”, la idea es que comuniques lo que te gusta y lo que no. Expresa qué sientes y cómo lo sientes, te aseguramos que tu pareja te lo agradecerá.
No ignores el resto de partes de su cuerpo. Las orejas, el pecho, la cara, la espalda, entre otras. Hay infinitas posibilidades y lugares con los que puedes jugar. No te limites sólo a los genitales.
No siempre seas tan agresiva y salvaje como querrías. O al menos, no al comenzar el encuentro sexual. De nuevo, esto puede funcionar para algunos, pero a casi todos les gusta hacer el amor de vez en cuando y no tener sexo salvaje todas las noches.
Ayúdale a tu pareja a desnudarse. Si tu chico no tiene ningún problema sé tú quien comience a quitarle la ropa, ese momento despierta sentimientos muy ricos que pueden que hacer que ambos se exciten y logren experimentar mayor placer al momento del encuentro sexual.
No dejes que ignore lo que llevas puesto. Cuando te compras un conjunto de ropa interior sexy sabemos que lo estás haciendo por él. Haz que lo vea, lúcelo con orgullo e invítalo a que te lo quite poco a poco. La idea de este accesorio es lucir hermosa y provocativa para él.
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