Aunque no lo creas, nuestras posturas sexuales favoritas podrían decir mucho sobre nosotras. No sólo se trata de qué posición nos parece más cómoda o nos brinda más placer, sino de encontrar aquello que no dejamos salir y que sólo despierta cuando estamos bajo las sábanas.
Tu personalidad
Misionero. Si te gusta esta postura significa que te atrae lo sencillo. No te interesa tanto la experimentación y prefieres crear una conexión con tu pareja a través de la mirada. Otra opción es que eres una mujer tan ocupada, que siempre estás demasiado cansada como para preocuparte por hacer todo el trabajo tú misma en la cama. Es una postura muy usada en las relaciones a largo plazo, ya que involucra mucha intimidad e indica que tienes un buen lazo con tu pareja y que estás dispuesta a enfocarte más en su placer que en el tuyo.
Vaquerita. Si te gusta a cargo de la situación, ésta es la postura ideal para ti. Te gusta controlar la acción y decidir tanto el ritmo, como la profundidad del acto, asegurándote de que las cosas se hacen como tú quieras. Eres una mujer que sabe lo que quiere y que suele salirse con la suya. Te sientes cómoda contigo misma y confías mucho en tus propias habilidades.
Cucharita. Ésta es una postura súper romántica que indica que confías plenamente en tu pareja y estás dispuesta a llevar la relación más lejos, yaque estás cediendo el control. Es una postura relajada que les permitirá disfrutar toda la noche. Eres una romántica y disfrutas del sexo lento y sensual.
Perrito. Además del nombre, definitivamente existe algo bastante salvaje sobre esta postura. Ésta es una posición para alguien sin tapujos y que no tiene miedo a mostrar quién es, incluso en la cama. No te importa ser un poco sumisa (¡pero sólo en la cama!) y permites que él tome el control solamente si él está dispuesto a tomarte con pasión y llevarte al éxtasis.
Vaquerita inversa. Probablemente la postura que representa mayor apertura en lo sexual, la vaquerita inversa indica que no tienes miedo a tomarlas cosas bajo tus propias manos. No te importa ser responsable de tu propio orgasmo mientras le das placer a tu chico al mismo tiempo. Es una buena postura para la mujer que disfruta de mostrar lo suyo, ya que le da a tu chico una vista increíble de tu cuerpo. ¿Quieres darle un show que jamás olvidará? ¡Es la postura perfecta!
Fuente: veintitantos