El líder del PSOE, Pedro Sánchez, comunicó hoy al presidente del Gobierno en funciones y candidato del PP, Mariano Rajoy, que «a día de hoy» los socialistas se reafirman en que votarán en contra si se presenta a la reelección.
Sánchez cerró la ronda de contactos que Rajoy ha mantenido con los diferentes partidos para sondear posibles apoyos a su elección como jefe del Gobierno, aunque hasta ahora no ha conseguido ninguno.
En una rueda de prensa tras el encuentro, el líder socialista pidió a Rajoy abrir «una negociación seria» para lograr apoyos suficientes y un gobierno estable, pero le advirtió de que «entre los aliados potenciales» no están los socialistas, que cuentan con 85 diputados en la Cámara baja.
El PP ganó las elecciones del pasado 26 de junio con 137 escaños, pero son insuficientes para gobernar, por lo que necesita pactar con otros partidos.
Sánchez insistió en que «investidura y gobernabilidad van de la mano» y que el PP, como partido mayoritario, tiene la «obligación de garantizar una mayoría suficiente para un gobierno estable».
Aunque Sánchez le dijo a Rajoy que tiene «plena disposición» a hablar con él «las veces que quiera», le repitió que «no puede contar» con el PSOE ni para el «gobierno de la gran coalición» ni para un «programa de legislatura».
El PSOE trata de evitar las presiones que se centran en el partido para que facilite el gobierno de Rajoy, después de que los liberales de Ciudadanos, el partido más próximo ideológicamente el PP, anunciaran que votarían en contra del candidato del PP en la primera votación y se abstendrían en la segunda.
Para ser elegido presidente del Gobierno en España, el candidato debe contar con la mayoría absoluta del Congreso (176 escaños) en la primera votación y mayoría simple (más síes que noes) en la segunda. EFE
