Tras casi cuatro años desde que entró en vigencia el decreto de exoneración de aranceles a productos importados la industria venezolana se sigue viendo afectada. Luigi Pisella, presidente de Conindustria, reiteró que los productos que entran amparados en esta normativa lo hacen de manera favorable y en detrimento en la producción nacional, atentando a demás contra la generación de empleo y el poder adquisitivo de los trabajadores
«Un país se construye produciendo, no solo importando. Tenemos este gran problema que afecta a la infustria desde hace casi cuatro años. Entran al país productos terminados, exonerados de IVA, aranceles y otras tasas afectando la producción nacional, la generación de empleo, el bienestar, la recuperación del poder adquisitivo», dijo al tiempo que destacó que a esta situación se suma la sobrevaluación de la moneda, que según cifras del Banco Central de Venezuela la inflación llegó a 686%, por lo que los productos nacionales fueron impulsados a aumentar sus precios. «Debido a esto, vemos es más fácil importar, porque sale más barato».
En este sentido, tachó como competencia desleal hacia la producción nacional porque la industria venezolana es la que está obligada a pagar los tributos exigidos por el Gobierno nacional.
El presidente de Conindustria enfatizó que no se está exigiendo que se elimine la importación, sino que haya una igualdad en las condiciones para poder impulsar la industria.
«A pesar de que la capacidad instalada de las industrias está por debajo y de los problemas del país en cuanto a servicios, buscamos solucionar, tenemos que producir. Debemos trabajar en conjunto para lograrlo. No estamos pidiendo que se elimine la importación, ella va a seguir entrando, pero el pago de los tributos, la competencia tiene que ser en igualdad», destacó en entrevista a Ginette González y Andrés Rojas en el espacio 2+2 de Unión Radio.
Y agregó: «Tenemos una inflación que se produce porque el Estado no tiene o no equilibra sus ingresos con su base y por eso tiene que recaudar más; lo que ha hecho es enfilar sus baterías hacia la producción nacional, es decir, nosotros, los pocos que quedamos, somos los que tenemos que generar los ingresos del país con apenas un 20% de lo que producíamos antes, cuando lo lógico es que también recaudes esos impuestos con los productos que vienen. No queremos que se sigan protegiendo la importación».
Por su parte, Guillermo Wallis, presidente de la Asociación de la Industria Química y Petroquímica señaló que esperan que se elimine el decreto de exoneración para que la industria aumente su producción así como la generación de empleo.
En este orden, indicó que aunque este año se espera sea mejor, la mitad de las empresas operan por debajo del 20 % de su capacidad instalada. “Lo cual es terriblemente grave».
Aseguró que existe una brecha con los productos importados respecto a los aranceles que van desde 5% hasta 20%. «A esto hay que sumar el IVA del 16%. Por lo que la materia prima de la industria venezolana tiene una desventaja respecto a la importación de productos importados de al menos 40%, porque estos úlyimos no pagan aranceles».
Agregó que solicitan al Estado el cobro de IVA a los productos importados para reducir un poco la brecha de costos.
El presidente de la Asociación de la Industria Química y Petroquímicaenfatizó que se está informalizando la estructura de comercialización, lo que está generando pérdidas fiscales en los municipios.
«La voracidad fiscal está afectando a toda la industria en el país. Hay una reducción de 70% o más en todos los establecimientos industriales del país», dijo.
Decreto
El 20 de enero el gobierno decidió prorrogar una vez más, esta vez hasta el 31 de marzo próximo, el decreto de exoneración de importaciones emitido el 6 agosto del año pasado y que después fue modificado parcialmente el 27 del mismo mes, donde más de 550 productos quedaron exceptuados de pagar aranceles e Impuesto al Valor Agregado (IVA) según lo determine la norma.
El decreto de extensión de estos beneficios a productos importados fue publicado en la Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.683, fechada el 14 de enero pasado.
Como se recordará, el Ejecutivo Nacional decidió exonerar a 597 productos -códigos arancelarios- de cargas aduaneras, cuya vigencia inicial fue hasta el 30 de noviembre de 2021, luego la norma se modificó posteriormente para excluir de la exoneración, en los términos previstos en los artículos 3 y 4 del decreto inicial, 32 productos ubicados en los apéndices I y II de la norma original y se agregaron 31 códigos arancelarios, discriminados en 7 al apéndice I; 8 al apéndice II; 14 al apéndice III; y 2 al apéndice IV.
Fuente: El Nacional