Tomás Ramos, presidente de la Federación Venezolana de Industriales de la Panificación y Afines (Fevipan), planteó la necesidad de ajustar los precios en los productos que venden a fin de cubrir los costos de producción, y que el kilo de pan debería venderse a 25 bolívares.
A su juicio, los 165.000 trabajadores que se encargan de la producción de harina no reciben el salario justo «tenemos que reconocer que muchas de esas personas no están bien pagadas (…) hay que ajustar los salarios para que tengan un calidad de vida más digna».
Acotó que la producción venezolana se incrementa cuando hay menos días festivos. Resaltó que el trabajo mancomunado podría resolver el problema de escasez y que tener más horas laborales permitirá al sector avanzar, según señaló a la emisora radial Unión Radio.
Fuente: EU
