Las detenidas del Centro de Resguardo al Aprehendido Masculino y Femenino de la Comandancia General de la Policía del estado Amazonas aseguran que todo era tranquilo hasta que llegó Sara Martí, una mujer de 51 años con una condición de salud mental (esquizofrenia), que fue detenida por estar en una concentración luego del pasado proceso electoral del pasado 28 de julio en Puerto Ayacucho.
“Aquí nadie está tranquilo, ni las detenidas, ni las funcionarias que custodian el centro, ella tiene una condición mental. Además, no ha cometido delito. Debería estar en libertad”, expresó una compañera de celda de Martí. Esta privada de libertad, que aunque está medicada y el centro tiene las medicinas, no hay quien vigilé que tomé el medicamento a la hora correcta o en el momento que lo amerite.
“En ocasiones nos bota los alimentos que con esfuerzo nuestros familiares nos traen los días de visitas, en una oportunidad echó los productos de limpieza en la comida, en medio de la noche grita, y se pone violenta”, así se expresó otra privada de libertad del centro.
Las detenidas del centro penitenciario le piden a las autoridades que tomen cartas en el asunto.
